CiU descarta un pacto de gobierno permanente con el PP o el PSOE

El vicepresidente segundo del Gobierno, Javier Arenas, expresó ayer la disposición del PP a dialogar con CiU, pese a que Rajoy ha anunciado que pretende formar un Gobierno «monocolor». El secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, en todo caso, insistió en que no se dan las condiciones para que los nacionalistas catalanes entren en el Gobierno o firmen un pacto de legislatura. Quien sí está convencido de que habrá un acuerdo PP-CiU es el secretario general de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, quien aseguró que los convergentes ya piden a Rajoy que «practique catalán en la intimidad». Arenas aseguró ayer que su partido estará dispuesto a hablar tras el 14-M con los partidos nacionalistas que respeten las reglas del juego, que acepten la Constitución y los estatutos de autonomía y que se sitúen en una política de centro. Esto descarta al PNV, partido en el que, según dijo, la doctrina de Arzalluz «sigue imperando con todas sus consecuencias» y señala directamente a Coalición Canaria y CiU, los dos partidos con los que ha colaborado en la pasada legislatura. El objetivo del PP es revalidar la mayoría absoluta. Aunque José Luis Rodríguez Zapatero ha prometido que sólo gobernará en caso de lograr un voto más que los populares, éstos saben que, de lograr una mayoría escasa, la legislatura se presentaría muy complicadaPero CiU no lo ve claro e insiste en que no habrá ministros convergentes en el próximo Gobierno, esté presidido por Rajoy o por Rodríguez Zapatero. Su secretario general, Josep Antoni Duran Lleida, aseguró que su partido sería «determinante», pero desde fuera del Gobierno. «Sería bueno que se dieran las circunstancias para participar en el Gobierno, pero es evidente que hoy no se dan, y por ello nuestra respuesta es un no insobornable», dijo. El «no» de CiU Tampoco, dijo, hay condiciones para llegar a cuerdos permanentes con ninguno de los dos partidos. «CiU tiene en su puerta un cartel que dice 'Hoy no se fía y mañana tampoco'», afirmó Duran Lleida, que, en todo caso, defendió la necesidad de que el PP pierda la mayoría absoluta de la última legislatura. «Conviene un periodo de oxigenación democrática», dijo, donde el Parlamente «recupere el centro de la decisión política». Pero Carod-Rovira está convencido de que CiU «ya ha tirado la toalla de un cambio de régimen democrático». «Dice que se han de enviar diccionarios al señor Rajoy para que practique el catalán en la intimidad», aseguró. «Lo que queremos no es que practique ni que deje de practicar, sino que nos dejen en paz de una vez, que aquí ya somos bastante mayores como para que nos dejen decidir en libertad aquello que queremos. Y, por favor, los del PP que no digan más tonterías y que no hagan más el ridículo», explicó.