Diario de León

Un informe del mismo día del atentado de los servicios de espionaje decía que «casi seguro» había sido la banda vasca

El Gobierno responsabiliza al CNI de que el atentado se atribuyera a ETA

Desclasifica documentos secretos para intentar probar que no mintió sobre el 11-M

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Gonzalo Bareño - redacción | madrid
León

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El Gobierno del PP se va como llegó: desclasificando papeles de los servicios secretos. Si el 19 de abril de 1997 desclasificó los papeles del Cesid reclamados por el Tribunal Supremo en relación al caso GAL, ayer, en una decisión sin precedentes y estando en funciones, decidió hacer públicos parte de los informes que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) elaboró inmediatamente después de los atentados del 11-M. Y, basándose en esos informes, el Gobierno culpó al CNI de que la acción criminal se atribuyera a ETA. El objetivo de esta desclasificación, de la que el Gobierno se limitó a informar al PSOE, es «demostar la inocencia y la honorabilidad» del Ejecutivo y «no pasar por mentirosos», según aseguró el portavoz, Eduardo Zaplana. «Se pueden perder las elecciones pero lo que no se va a permitir es que se le tenga por mentiroso», dijo Zaplana respecto al Gobierno. Junto al ministro portavoz compareció el ministro de Interior, Ángel Acebes, que insistió en que el Gobierno ha hecho un «ejercicio de transparencia». De la información aportada por el Gabinete, y de las palabras de los ministros, se deduce que el Ejecutivo descarga toda la responsabilidad sobre la atribución a ETA en los servicios secretos. El dossier, titulado «11-M: toda la verdad, en tiempo real», incluye un total de siete documentos, de los cuales sólo dos son del CNI. En el primer documento atribuido al CNI se dice, en su primer párrafo, que «se considera casi seguro que la organización terrorista ETA es la autora de los atentados». En ese informe hay un párrafo tachado porque «podría perjudicar la investigación», según explicó Acebes. Está elaborado el mismo día de los atentados y es la principal baza a la que se aferra el Gobierno para justificar la seguridad con la que Acebes lo atribuyó «sin ninguna duda» a ETA. El otro documento del CNI está fechado el día 12 (viernes) y en él se pone en duda la veracidad del comunicado de reivindicación de Al Qaida al diario londinense Al Quds. La furgoneta El dossier contiene también un documento elaborado por el subdirector general operativo de la policía, Pedro Díez-Pintado, que aclara las circunstancias en las que se halló en Alcalá de Henares la furgoneta con los detonadores. Consta igualmente el correo electrónico que la ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, envío el mismo día 11 a todos los embajadores instándo-les a atribuir el atentado a ETA. Se incluye además un informe de la directora del Instituto Anatómico Forense, Carmen Baladía, en el que se descarta que ninguno de los fallecidos en los atentados sea un suicida. Además, constan dos cronologías sobre las comparecencias informativas del Gobierno. Estos datos son suficientes, según el Ejecutivo, para demostrar que toda la información que se dio es verídica. El Gobierno, dijo Zaplana con rotundidad, «no ha mentido y nadie podrá acreditar lo contrario». Justificó la excepcionalidad de desclasificar estos documentos en la necesiudad de que los ciudadanos sepan que su Gobierno no les miente. Respecto a las llamadas de Aznar a varios medios asegurándoles que la culpable era ETA, lejos de califi carlas de presiones, indicó que fueron «un ejercicio de transparencia democrática». El PSOE matizó ayer que fue informado, pero no consultado, por el Gobierno de la decisión de desclasificar los informes. El vicepresidente segundo, Javier Arenas, telefoneó al encargado de la transmisión de poderes por parte socialista, Jesús Caldera, «minutos antes» de que se hiciera pública la decisión de levantar el secreto sobre los documentos clasificados. Una versión que coincide con la proporcionada por el portavoz del Gobierno, quien tras la reunión del Consejo de Ministros señaló que «se ha informado» al PSOE de la decisión tomada. Fuentes cercanas al portavoz parlamentario del PSOE señalaron que les hubiera gustado haber sido consultados sobre la conveniencia de hacer públicos los informes de los servicios de espionaje. «El Gobierno no mintió. Otros que puedan haber manipulado y mentido serán los que tengan que dar muchas explicaciones a la opinión pública» ÁNGEL ACEBES Ministro de Interior en funciones

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