Zapatero medita en Canarias

José Luis Rodríguez Zapatero aprovechará este fin de semana para meditar en Lanzarote la composición de su futuro gobierno. El secretario general del PSOE ha comenzado ya sus primeros contactos con dirigentes de su partido y personalidades afines al mismo pero, de momento, sólo hay una cartera adjudicada: la de Defensa para su antiguo rival en la pugna por las riendas de la formación, José Bono. La intención del futuro jefe del Ejecutivo es mantenerse alejado por unos días del ajetreo informativo y hacer sus encajes dentro de un esquema en el que en lugar de tres vicepresidencias, como parecía en un principio, podría haber una política, para la que suena el nombre de Magdalena Álvarez, y otra económica que correspondería a Pedro Solbes. Se mantendría así el modelo actual. El descanso de Rodríguez Zapatero -que permanecerá hasta el domingo con su familia en un hotel de la costa de Teguise- no ha conseguido aplacar los rumores acerca de las personas que merecerán un puesto de confianza en su gabinete. En principio, parece cada vez más remota la posibilidad de que Miguel Sebastián, responsable del programa económico del PSOE, se haga cargo del área de Economía. El ex jefe del servicio de estudios del BBVA es un independiente con poco perfil político, por lo que el puesto que parecía estarle destinado podría recaer en Solbes, un veterano del partido que en la actualidad es comisario de Economía y Finanzas de la Unión Europea y que ocupó la cartera de Economía y Hacienda en el último Gobierno de Felipe González. El nombre de la ex consejera de Economía y Hacienda de la Junta de Andalucía, Magdalena Álvarez, se asociaba también hasta hace unos días con responsabilidades relacionadas con ese ámbito económico. Pero en las últimas horas su figura ha crecido al extremo de que miembros de la Ejecutiva socialista la colocan al frente de la vicepresidencia política del equipo de Rodríguez Zapatero. Con esa solución, Rodríguez Zapatero resolvería dos problemas con una sola jugada. Tendría a su lado a una persona de su entera confianza, y una mujer en uno de los puestos más significativos de su gabinete le permitiría rebajar las exigencias de la prometida paridad de sexos. Rodríguez Zapatero quiere formar un gobierno en el que aparezca con fuerza la idea de equipo de trabajo, por lo que trata de evitar la sensación de que, al nombrar a su vicepresidente primero, está designando a un número dos. Éste era un riesgo que corría con el portavoz del PSOE en el Congreso durante esta legislatura, Jesús Caldera. Su candidatura se barajó para una de las vicepresidencias que el líder socialista parecía tener en mente. En los últimos meses el secretario general de los socialistas aseguró que le pondría al frente de un puesto de esa categoría o de un ministerio importante. Ahora, esta segunda posibilidad parece más plausible. Poderes autonómicos Con el nombramiento de Magdalena Álvarez -miembro del Comité de Notables que creó antes de las elecciones, como Solbes y Sebastián-, Rodríguez Zapatero saldaría además una parte de la «deuda» que ha contraído con aquellas comunidades que más responsabilidad han tenido en su victoria y con los tradicionales «barones» socialistas. Según esta misma lógica, el consejero de Sanidad de Juan Carlos Rodríguez Ibarra, en Extremadura, podría ser reclamado para tomar las riendas del ministerio que ahora dirige la popular Ana Pastor. Y aún habría que hacer sitio a un ministro catalán y a uno vasco, en recompensa por los resultados electorales del PSC y el PSE. En principio, parece que José Montilla, número dos de Pasqual Maragall, será el elegido por Cataluña ; posiblemente para ocupar la cartera de Industria, Comercio y Turismo. El nombre del socialista vasco está menos claro, como ocurre también con el del canario que prometió colocar en su Gobierno durante un mitin celebrado en Las Palmas hace poco más de una semana. El principal aspirante sería Juan Fernando López Aguilar, a quien ciertas voces sitúan en Justicia. Sin embargo, parece más probable que esta cartera recaiga finalmente en José Antonio Alonso, magistrado en excedencia y número uno del PSOE por León, donde el partido cosechó unos excelentes resultados. En cualquier caso, no será hasta la próxima semana cuando Rodríguez Zapatero -que trabaja en solitario sobre el esquema de gobierno- empiece a realizar propuestas concretas. De momento, está cumpliendo otra de las promesas realizadas en campaña: la de regresar a las Canarias después de las elecciones, no para trabajar, sino para va a tomarse unos días de asueto.