Acebes apunta como autor del 11-M al Grupo Islámico Combatiente Marroquí

El ministro de Interior en fun-ciones, Ángel Acebes, compareció ayer en rueda de prensa y explicó que la principal teoría que barajan los investigadores sobre la autoría del 11-M les lleva al Grupo Islámico Combatiente Marroquí. Cuatro han sido las líneas de inves-tigación seguidas por las fuerzas de seguridad desde los atentados: los teléfonos y las tarjetas hallados, la compra y venta de los detonadores y explosivos, la localización de los inmuebles relacionados con los detenidos -especialmente la vi-vienda de Morata de Tajuña donde se prepararon las bolsas de deporte que escondían las bombas- y final-mente los testimonios facilitados por los ciudadanos que iban en los trenes de cercanías. Precisamente siguiendo dos de estas cuatro líneas de investigación se han conseguido tres nuevas de-tenciones que elevan ya a 23 los arrestos. Se trata, según informó el ministro en funciones, de Antonio Toro Castro, el cuñado del ex minero asturiano José Emilio Suárez, acusado de facilitar los más de cien kilos de goma 2 Eco a los terroristas; y de dos ciudadanos sirios, Walid Altaraki Almasri y Mohamad Badr Ddin Akkad, cuyas huellas fueron halladas en la casa de Morata de Tajuña. Según todos los datos disponibles, Toro Castro fue quien medió entre su cuñado y los terroristas. Parece ser que fue quien los presentó, ya que conocía de la cárcel asturiana de Villabona a varios de los implicados. Autores materiales Entre los detenidos se encuentran, según Acebes, varios de los autores materiales de los atentados, aunque ninguno de ellos ha reconocido su participación en los trágicos sucesos del 11-M. Varios testigos han identificado no sólo al marroquí Jamal Zougam de-tenido en Lavapiés, sino también al químico Abderrahim Zbaj y al sirio Basel Ghayoun, detenido en Toledo, como algunas de las personas que vieron en los trenes o los andenes como mochilas. Pese a todo, al menos otros seis su-puestos terroristas que viajaron en los trenes de Alcalá y Guadalajara aún no han sido detenidos. La policía ha dictado órdenes de búsqueda y captura para todos ellos. La cinta de vídeo Acebes reveló ayer un dato nuevo sobre la investigación. La cinta de vídeo que apareció dos días des-pués de la masacre en una papelera cercana a la Mezquita de la M-30, y en la que un portavoz de Al Qaida en Europa reivindicaba el atentado, fue vendida en la misma tienda de Alcorcón en la que se vendieron muchos de los teléfonos móviles que activaron las bombas. La Policía ha encontrado en la tienda que regentaban los sirios Suresh Kumar y Vinay Kholy, numerosas cintas de vídeo de la misma marca y modelo de la hallada con la reivindicación. Angel Acebes confirmó ayer que Interior está colaborando estrechamente con los servicios de inteligencia marroquíes, que han enviado muestras de ADN de la familia de Abdelkrim Thami Mejjati. El ministro de Interior en funciones dejó abierta la posibilidad a nuevas detenciones en Marruecos «en los próximos días». La adjudicación de la autoría del atentado al Grupo Islámico Comba-tiente Marroquí -aunque Acebes insiste en que no se descartan aún otros grupos terroristas- reabre la posible conexión entre los autores de la matanza de Madrid y los del atentado de Casablanca, una teoría que ya surgió dos días después de los atentados en España del 11-M y que entonces fue descartada por los servicios de investigación.