Una pareja de etarras vinculada a Antxa logró escapar de la policía

Los dos detenidos el pasado domingo en la fábrica de armas de ETA en Francia, José Zeberio Aierbe y Jean Marie Saint-Pee, han pasado a disposición judicial y declararán en París ante la juez antiterrorista Laurence Le Vert. Dentro de esta operación policial, también se desarrollaba la vigilancia de una pareja de supuestos etarras, residentes en un apartamento de Bagnères de Bigorre (Altos Pirineos), que según cuenta el diario francés Le Figaro escapó del cerco policial, y que podría conocer el paradero del líder de la banda Mikel Antza. Los etarras se habrían volatilizado horas antes de que la policía lanzase la operación que permitió el arresto de Esparza, López de la Calle y Chivite. En su precipitada fuga, la pareja habría abandonado documentación y también algunos artefactos explosivos en el piso donde vivían, así como el coche que utilizaban. La policía gala está convencida de que Mikel Antza se halla escondido en algún lugar del gran suroeste, según 'Le Figaro', aunque el tan buscado número uno de ETA viviese en el pasado en la capital francesa. La policía prosigue el registro minucioso de la vivienda donde se hallaron los más de 500 kilos de explosivos, así como granadas y lanzacohetes, que guardaban los etarras para utilizar en futuros atentados. El resto de detenidos ha pasado ya a disposición judicial. Dirigentes de Batasuna libres La Audiencia Nacional dejó en libertad bajo fianza a cuatro de los principales promotores de la «asamblea de electos» de Batasuna, Udalbiltza-Kursaal, encarcelados desde mayo y septiembre del 2003 por orden del juez Baltasar Garzón. Se trata del francés Xarlo Etxezaharreta, director de la revista Kale Gorria, y los españoles Loren Arkotxa, ex alcalde de Ondarroa y presidente de la «asamblea de electos», e Imanol Esnaola y Miren Josu Aranburu, ex concejales abertzales en Lezo y Urretxu (Guipúzcoa). La decisión la adoptaron los jueces de la Sección Primera de lo Penal tras el informe favorable de la Fiscalía. Etxezharreta deberá depositar una fianza de 60.000 euros en metálico y designar un domicilio en España. Las cantidades decretadas para Arkotxa, Esnaola y Aranburu en concepto de garantía ascienden a 30.000 euros.