Refuerzo de las tradiciones

La Hermandad de la Santa Cena de Astorga sacó anoche a la calle la procesión del mismo nombre, con varias novedades entre las que figuran las nuevas túnicas y capas de las tallas que forman el paso de el Prendimiento de Cristo, conocido como el Beso de Judas. Las imágenes, que fueron portadas también el martes en la Procesión del Vía Crucis, lucieron ya entonces una composición modificada sobre el trono, que la hermandad también renovó a la espera de poder completarlo el año próximo con la decoración. Antes del desfile la cofradía realizó por primera vez este año un breve recorrido desde su cabildo a la iglesia de San Bartolomé en el que portó estandartes, atributos y los panes que posteriormente fueron bendecidos. El cortejo semanasantero estuvo compuesto, además de por el Beso de Judas, que desfiló custodiado por tres legionarios romanos, por el Cautivo, la Oración en el Huerto y la Santa Cena. Los dos últimos, obra de Manuel Aldrey de la década de los cincuenta, fueron llevados en ruedas, al igual que el prendimiento, realizado por José Romero Tena en 1909 e inspirado en el mismo tema de Salzillo. Mientras, el Cautivo, que la hermandad ordenó realizar a finales de los años noventa, fue portado por cuarenta cargadores desde su interior. Completaban la comitiva sendas bandas de Santa María del Páramo y Palencia, así como un quinteto de música de capilla compuesto por alumnos de la escuela de música de Astorga. Esta noche la Hermandad de Caballeros del Silencio partirá a las 22.00 horas de la parroquia de San Bartolomé, tras emitir su voto de silencio que los cofrades sólo romperán al término del desfile. A las dos de la madrugada la Cofradía de la Santa Vera Cruz y Confalón comenzará su Procesión Penitencial, que incluirá el Enclavamiento del Cristo Yacente.