Un brindis de orujo multitudinario recordó la muerte del pellejero
Como cada año miles de leoneses acompañaron al pellejero por el casco antiguo de la ciudad
La procesión de Genarín, una de las manifestaciones más profanas de la Semana Santa de la comunidad, congregó en la noche del jueves al viernes a cientos de personas en la capital leonesa en una tradición que cumple este año su 75 aniversario. La Cofradía de Nuestro Padre Genaro se reúnen cada Jueves Santo para recordar la figura de Genarín, «borrachín y pellejero» que el 29 de marzo de 1929 murió atropellado por un camión de la basura en las murallas de la capital leonesa. De acuerdo con el tradicional ritual, los miembros de la cofradía comenzaron la celebración con una cena a base de sopas de ajo, entremeses y bacalao, las viandas que en su día acostumbraba a comer Genaro, que culminó con la lectura de poemas en los que no faltaron las alusiones a la actualidad y, especialmente, a la victoria de José Luis Rodríguez Zapatero en las últimas elecciones generales, un hecho que calificaron de «milagroso» o a la boda del Príncipe de Asturias con Doña Leticia Ortiz. En este sentido, el abad de la Cofradía de Nuestro Padre Genaro, Máximo Barte, aseguró que «en este 75 aniversario, todos han coincidido con que Genaro ha obrado un nuevo milagro que un paisano nuestro haya llegado a presidente de Gobierno». Tras la cena, cofrades y seguidores del pellejero sacaron en procesión al santo por las calles del Barrio Húmedo de León para efectuar el recorrido acostumbrado por el pícaro pellejero a través de las tabernas de la ciudad. La procesión pagana que cada día cuenta con más adeptos terminó en las murallas, donde uno de los miembros de la Cofradía de Nuestro Padre Genaro, denominado el «Hermano trepador», ascendió por cuarto año consecutivo llevando una corona de laurel, una botella de orujo, una naranja y un pedazo de queso. Leoneses y visitantes brindaron, como manda la tradición del entierro bajo el cántico «Suguiendo sus costumbres que nunca fueron un lujo, bebamos en su memoria una copita de orujo». La procesión terminó con el último brindis de orujo. El próximo año, un homenaje Cuando se cumple el 75 aniversario de la muerte de Genarín, la cofradía del mismo nombre tiene previsto celebrar una exposición y una antología de poemas sobre el personaje que da nombre y sirve de excusa a esta particular procesión. Al principio el entierro tenía forma de ronda poética de amigos que fue creciendo boca a boca de forma de forma que ha llegado a ser muy popular.