Estados Unidos espera que el Gobierno español siga participando a través de la Otan
La Casa Blanca pide que la retirada sea «coordinada, responsable y ordenada»
Rajoy asegura que España es ahora más «vulnerable» contra el terrorismo internacional
La noticia dominical de la inmediata retirada de las tropas españolas en Irak no pareció sorprender a EEUU. En comunicación telefónica con este medio, el portavoz de guardia en la Casa Blanca, Ken Lisatus, recordó que se trataba de una promesa ya anunciada en campaña y pidió que se lleve a cabo «de una forma coordinada, responsable y ordenada». En sus palabras, elegidas cuidadosamente para ser repetidas una por una a otros medios, no había un mensaje expreso de dureza hacia el nuevo gobierno español, aunque sí de agradecimiento para «los otros miembros de la coalición» por «sus muestras de solidaridad», dijo. «Dicho esto, esperamos seguir trabajando con nuestro aliado español en la Otan en la lucha contra el terrorismo», subrayó. Pese a que se sabe que el recién nombrado ministro de Defensa español, José Bono, se había reunido en secreto con su homólogo estadounidense, Donald Rumsfeld, Lisaius insistió en que el conocimiento de su gobierno sobre la decisión española procedía de «las recientes elecciones españolas». Poco antes de que se produjera el anuncio formal, la Consejera de Seguridad Nacional, Condoleezza Rice, había afirmado en una entrevista ya programada que «no le sorprendería en absoluto» que el nuevo gobierno español cumpliera su amenaza, y pidió que no se menospreciara la presencia de otros países como Ucrania, Italia, Polonia o Japón, «donde su gente también ha muerto en este sacrificio». Tirar la toalla La retirada de las tropas convierte a España en un país más vulnerable al terrorismo. Así lo afirmó el secretario general del PP, Mariano Rajoy, quien lamentó que el Gobierno haya «tirado la toalla» antes de intentar la vía de una nueva resolución de la ONU. Para el PP, Zapatero tenía tomada la decisión «por razones internas» y la ocultó al Parlamento en su debate de investidura a pesar de los requerimientos del portavoz de la oposición. «Tomar esta decisión por sorpresa y con precipitación no es un buen mensaje para la lucha contra el terrorismo y hace a España más vulnerable», señaló Rajoy, quien insistió en que abandonar la zona de conflicto supone un gesto de «insolidaridad» con el pueblo iraquí.