El centenar de amotinados depusieron su actitud después de cinco horas de negociación
Herido grave el subdirector de la cárcel de Quatre Camins tras un motín
Un preso asegura en una emisora que el detonante de los disturbios fue una paliza a un interno
Alrededor de un centenar de presos de la cárcel de Quatre Camins, ubicada en la localidad barcelonesa de la Roca del Vallès, se amotinaron a media tarde de ayer e hirieron gravemente al subdirector del centro penitenciario, Manuel Tallón, que permanece internado en estado «muy grave» en el hospital Vall d'Hebrón. La rebelión de los reclusos concluyó unas cinco horas después de su inicio, al filo de las diez de la noche, cuando depusieron su actitud tras conversar con responsables de la Administración penitenciaria catalana. Hasta el momento en que decidieron regresar pacíficamente a sus celdas, los amotinados mantuvieron retenido a un funcionario de la prisión y se movilizaron numerosos agentes antidisturbios, algunos de cuyos efectivos llegaron a entrar en el centro penitenciario armados con escopetas de pelotas de goma. El funcionario al que los presos mantuvieron como rehén, Jordi Laborda, permaneció atado a una silla y está ileso, aunque se encontraba en estado de shock cuando fue liberado. La cárcel de Quatre Camins, cuya administración y gestión depende de la Generalitat, vivió durante casi cinco horas momentos de extrema tensión. Según fuentes penitenciarias, los protagonistas del motín fueron cerca de 80 reclusos que pertenecen al módulo 1 de la prisión, que alberga a los 222 internos de segundo grado considerados más peligrosos. Los disturbios se iniciaron poco después de las cinco de la tarde de manera sorpresiva, cuando un grupo de presos que esgrimía «pinchos» elaborados de forma artesanal retuvieron a un funcionario como rehén y agredieron al subdirector del centro, Manuel Tallón, con uno de estos punzones cuando intentaba mediar en el altercado. Tallón fue agredido y sufrió heridas con un «pincho» en el cuello. Tras ser reanimado en el interior de la cárcel, fue trasladado urgentemente al hospital Vall d'Hebrón, en Barcelona, donde permanece ingresado en la UCI en estado muy grave. Sufre un traumatismo cranoencefálico y una herida superficial de arma blanca en el cuello. Los presos amotinados se pusieron en contacto a través de unmóvil con la cadena Ser y justificaron su actitud afirmando que en el interior de la cárcel se producen «abusos de poder». Uno de los amotinados explicó que el motín ha comenzado porque «ha venido un preso de hacer un bis a bis y entre dos guardias le han pegado una paliza». El interno ha agregado que «entonces, entre los demás nos hemos rebotado y ha salido herido el subdirector, bastante herido, y tenemos de rehén a otro guardia y se ha liado un motín, ni más ni menos». Los presos solicitaron entrevistarse con la consellera de Interior, Montserrat Tura, y hasta la cárcel se trasladó el secretario de Asuntos Penitenciarios, Albert Ballé, quien junto a otros integrantes de la dirección del centro inició conversó con los amotinados para que cedieran en su violenta actitud. Hasta ese momento, numerosos vehículos de los Mossos d'Esquadra y diversas ambulancias rodeaban el recinto penitenciario mientras que cerca de 150 agentes antidisturbios se prepararon para una eventual intervención con el apoyo aéreo de, al menos un helicóptero. La Generalitat confirmó que ha abierto un expediente informativo para delimitar el origen de la revuelta y depurar responsabilidades entre los autores e instigadores de la misma.