Un anciano mata de una puñalada a su mujer en una reunión familiar

Sin conceder un respiro, la violencia doméstica volvió a cobrarse una nueva víctima mortal entre las mujeres españolas, y suman ya al menos 28 en lo que va de año, además de cuatro menores muertos a manos de sus propios padres. Después del asesinato de una mujer este martes en Barcelona, pocas horas después, en la madrugada del miércoles, un hombre de 71 años acabó con la vida de su esposa, de 62, al acuchillarla en la localidad zaragozana de Cariñena. Al parecer, tras una discusión del matrimonio durante una celebración familiar en su domicilio, situado en la calle Mayor del municipio, Rafael A.V. asestó una puñalada a la altura del corazón a su mujer, Amelia Pallarés, causándole la muerte casi en el acto. Una de las dos hijas de la pareja y varios familiares de la víctima se encontraban en la vivienda en el momento de la agresión, que se produjo hacia la una de la madrugada. Tras matar a su esposa el hombre se infligió varias puñaladas en el abdomen, por lo que tuvo que ser trasladado al Hospital Clínico de Zaragoza. Quedó ingresado en urgencias aunque sus lesiones no revestían gravedad, para pasar después a disposición judicial. La mujer no había presentado denuncia previa alguna por malos tratos ni constaban antecedentes de violencia en su hogar, confirmó el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández. Por su parte, los vecinos de la pareja aseguraron que nunca habían presenciado discusiones ni peleas entre la pareja. El matrimonio era muy conocido en la localidad, acababa de regresar de un viaje a Tenerife y no tenía problemas económicos. La localidad de Cariñena, de unos 3.000 habitantes, recibió con incredulidad y estupefacción la noticia del suceso. El matrimonio tenía dos hijas, y había cenado con familiares llegados desde Madrid, con motivo, el próximo domingo, de la comunión de uno de los nietos. Nadie se explica qué pudo conducir a Rafael a apuñalar a su mujer de esa manera. Asesinato de Barcelona Por su parte, la Jefatura Superior de Policía de Barcelona confirmó que el hombre de 36 años, Mario P.L., que este martes se suicidó en Barcelona después de matar a una mujer de 40 años, Maria del Carmen G.R., tenía una causa pendiente con la justicia del mes de mayo de 2003 por un presunto delito de agresión sexual y lesiones psíquicas contra otra mujer. La policía investiga la relación que el asesino mantenía con su víctima.