Agencia del Instituto del Carbón y oficinas en Ponferrada y León

Uno de los grandes compromisos de José Luis Rodríguez Zapatero y del PSOE para la provincia durante la campaña electoral que luego les llevó al Gobierno fue el de la reactivación económica y social de las cuencas mineras. Así, tanto él como los candidatos por León se comprometieron a cumplir una parte del Plan del carbón (1998-2005): la creación de sendas agencias de desarrollo regional en León y Asturias, y dependientes del Instituto del Carbón del Ministerio de Industria, dotándolas con los 15.000 millones de pesetas que el documento marco para la reconversión y desarrollo industrial alternativo de las cuencas carboneras contempla y que no se han hecho efectivas. La promesa electoral socialista, repetida en Asturias, añadía que la agencia leonesa tendría oficinas en León y Ponferrada para acercar el proceso de atracción de industrias, la gestión diaria y el conocimiento de las necesidades a los territorios mineros. El POSE se comprometió a ponerlas en marcha en cuanto llegase al Gobierno y se añadió después que posiblemente serían aprobadas en el Consejo de Ministros que Zapatero va a celebrar en León. La minería, eje Durante los últimos años, tanto el entonces diputado Zapatero como su partido mantuvieron una línea de defensa del sector minero y de denuncias de incumplimientos del Plan del carbón por el PP que ahora han prometido cumplir o cambiar. Entre ellas, la política de atracción de empresas a las cuencas para crear industrias y empleos fuera de este sector, la defensa de la continuidad de las minas en sus parámetros actuales por su competitividad y para dar tiempo suficiente a que estos territorios no dependan en exclusiva de ellas y una política de infraestructuras con fondos mineros verdaderamente adicional a las inversiones ordinarias que deben hacer las administraciones central, autonómica y provincial. En el caso de la creación de puestos de trabajo no mineros, el balance es que hay comprometidos en las cuencas leonesas y palentinas 3.650 empleos, de los que sólo se han materializado realmente aún 1.900; mientras, van 4.500 prejubilaciones. En cuanto a las infraestructuras, va a ser imposible que se aprueben proyectos de obras dado que la comisión regional de minería lleva meses sin reunirse para decidir qué obras se solicitan a Madrid, lo que hace que hasta octubre al menos el Consejo de Ministros no las pueda aprobar. Y en cuanto al sector, se espera que para el 25 de junio esté ultimada la reserva estratégica.