El lanzador mira a Atenas, Ché está reivindicativo y Arcilla se acopla a los 20 kilómetros

La Gala resultó poco propicia para escuchar grandes declaraciones tanto de premiados como de políticos y eso que el número de éstos últimos era bastante elevado. El que no asistió, curiosamente, fue el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. Para cubrir su ausencia, la Junta envió a dos consejeros, la titular de Cultura y Deportes, Silvia Clemente, que cerró el acto con su alocución y Antonio Silván, consejero de Fomento y portavoz del ejecutivo. En lo que se refiere a los tres premiados leoneses, el Ché Escanciano estuvo reivindicativo en su breve alocución.Pidió a la consejera más apoyo y difusión para la lucha leonesa. Manolo Martínez dijo estar pensando ya en Atenas, motivado por competir en la cuna del movimiento olímpico, aunque aún está en pleno rodaje porque aún le restan dos meses y medio. Por último, el joven marchador Francisco Arcilla manifestó que también está en pleno rodaje, pero para tomarle el pulso a los 20 kilómetros. Mientras recogía su galardón en el estrado, Paco recordó sus inicios en la marcha cuando no pudo contener las lágrimas por el exceso de longitud siendo alumno del colegio Luis Vives.