Álvarez no suprimirá los peajes a Astorga y Asturias por el alto coste para el Estado

La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, anunció el martes en el Congreso de los Diputados que su departamento no tiene intención de suprimir ningún peaje de las autopistas españolas por su excesivo coste para el Estado. Esto incluiría los dos existentes en la provincia de León, los de la AP-71 a Astorga y de la AP-66 a Asturias, que el PSOE incluyó en su programa electoral para la provincia y que ratificaron e insistieron durante y después de la campaña, incluso cuando ya se sabían ganadores de los comicios y que se iban a aupar al Gobierno de España. «En cuanto al peaje que está concedido y si lo vamos a suspender, pues no», respondió a preguntas de los parlamentarios que requerían a la ministra la eliminación de las tasas por uso de autopistas en diversos puntos de España. «No hay urgencia porque no estamos en condiciones de plantearnos qué vamos a hacer con ellos. Hemos hecho cuentas de cuánto supondría el rescate de los peajes, y quiero que sepan que estamos hablando de 16.232 millones de euros», se justificaba Magdalena Álvarez: «Significaría cuatro años sin hacer nada en carreteras en todo el país o dos años que consumiría todo el presupuesto del Ministerio, incluido la nómina». La titular de fomento criticó la política llevada a cabo por el PP y les criticó de su etapa el elevado número de autopistas que se crearon, en vez de autovías, de una forma «desequilibrada» y que responde a «impulsos de privatización que dominaron en los últimos años de la dictadura y en la legislatura de los últimos gobiernos del Partido Popular». Álvarez se limitó a afirmar que el PSOE no hará peajes si no hay vías de «alta capacidad» alternativas. «La explotación con peaje en régimen de concesión de los tramos ya existentes o de posibles nuevos tramos deberá estar supeditada a criterios funcionales y territoriales y, en ningún caso, a criterios de oportunidad financiera de las operaciones», añadió. Promesa socialista La supresión del peaje de las autopistas a Asturias y a Astorga ha constituido uno de los caballos de batalla de los socialistas leoneses en el Congreso de los Diputados en la anterior legislatura -en la que presentaron numerosas iniciativas tendentes a su eliminación- y en la campaña electoral para las generales de marzo pasado, tras las que alcanzaron el Gobierno central. Incluso en las semanas siguientes a los comicios los cargos electos socialistas mantuvieron que esta era una promesa avalada por José Luis Rodríguez Zapatero y que la llevarían adelante fuese como fuese. Reconocieron que el compromiso adquirido también con Asturias para la AP-66 iba a ser «difícil» de materializar, pero sentenciaron que habría que negociar con las concesionarias, Aulesa (de Dragados) y Aucalsa (de Vallehermoso), para irlos reduciendo progresivamente, convertirlos en peajes en la sombra -pagados por Estado en función de los usuarios- o rescatarlos por un coste económico razonable. Las palabras de la ministra de Fomento parecen echar por tierra la promesa y las expectativas creadas. «Significaría cuatro años sin hacer nada en carreteras en todo el país o dos años del presupuesto del Ministerio, incluidas las nóminas» MAGDALENA ÁLVAREZ Ministra de Fomento «No hay una lógica en las decisiones, han sido tomadas con premura y precipitadamente bajo presiones de cualquier tipo, electorales, de partido, de vecindad, de lo que sea. MAGDALENA ÁLVAREZ, Ministra de Fomento