Los buzos no hallan a ningún desaparecido en el «O Bahía»
Fomento intensifica el dispositivo de búsqueda por mar y tierra como única alternativa para encontrar los cuerpos de los cuatro marineros que aún permanecen desaparecidos
El dispositivo de búsqueda de los cuatro marineros desaparecidos tras el naufragio del pesquero O Bahía finalizó sin resultado, a pesar de que los buzos pudieron entrar en los camarotes, donde se suponía que estaban atrapados los cadáveres. Pasadas las dos y media de la madrugada, el equipo de especialistas revisó las distintas dependencias del barco sin encontrar rastro de los cuatro hombres. Con estos datos en la mano la subdelegada del Gobierno en Galicia, Obdulia Taboadela, aseguró que «con mucha tristeza podemos confirmar que es muy poco probable que los cuerpos estén en el interior del pecio». Durante la mañana, en el segundo turno de la jornada, se inspeccionaron la bodega y el pañol -almacén de herramientas del buque- para descartar que estuvieran en estas salas, aunque ya se suponía que no era posible. El propio capitán marítimo de Coruña, Francisco Suárez-Llanos apuntaba ya por la mañana en el caso de la bodega «suele estar sellada» y que la presión del agua había aplastado las paredes dejando un espacio muy pequeño para que un cuerpo pueda estar atrapado en él. Tampoco parecía entonces factible que estuvieran en la sala de herramientas. Con pesimismo explicó que las labores se centraron en la recogida de las redes que están sobre el barco. Los buzos las enrollaron y colocaron en un cesta del tamaño de un contenedor, en la que se subirán a tierra. Una vez en la superficie «se extenderán para comprobar que los tripulantes desaparecidos no están en ellas», manifestó Suárez-Llanos. Estos aparejos, casi 40 metros, están enmarañados y es difícil ver con claridad qué hay en su interior, por eso se decidió subirlos a bordo. La última operación que realizaron los escafandristas se centró en el control de los alrededores del pecio en una distancia de entre 50 y 100 metros, tras lo que se levantaría el dispositivo de búsqueda en el fondo del mar, aparezcan o no los cuerpos. No ocurrirá así con los operativos que desde tierra controlan la costa, coordinados por la Guardia Civil y Protección Civil, que permanecerán pendientes al mar por si decide devolver los cadáveres. Francisco Suárez-Llanos apuntó que en estos momentos todo es posible y que «podrían aparecer en el litoral en días venideros o puede que no aparezcan nunca».