Diario de León

Antes del descubrimiento médico de Fleming, la longevidad era de 62 años y la mitad de los nacidos no llegaba a los 18 años

La vida de los leoneses se ha alargado18 años durante la era de los antibióticos

En la década de 1920, cada año morían 250 habitantes de cada mil, cuando hoy la tasa no llega al 10%

Cartel de la II Guerra Mundial en el que se alaba la penicilina

Cartel de la II Guerra Mundial en el que se alaba la penicilina

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Marco Romero - león
León

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«Hay que congratularse de los algunos buenos resultados que están dando las investigaciones de la penicilina en España» ALEXANDER FLEMING, en su carta a un directivo de Antibióticos La vida media de un leonés es hoy 18 años más larga que hace 50 años, cuando se comenzaron a producir los primeros antibióticos en base a las investigaciones sobre la penicilina, descubierta por Alexander Fleming hace ahora 75 años. Este es el indicador que, en opinión del catedrático de Microbiología de la Universidad de León Juan Francisco Martín, mejor puede medir el impacto del hallazgo más sobresaliente de la medicina en todo el siglo XX. Durante la era de la penicilina, la esperanza de vida de un leonés ha pasado de los 62 años a los 80,5 -las mujeres son las segundas más longevas de toda España- y la edad media de los habitantes subió hasta los 44,3, cuando en la segunda mitad del siglo XX sólo la mitad de los nacidos alcanzaban los 18 años, según consta en los anuarios históricos del INE. Los antibióticos, de los que hoy existen más de 3.000 derivados, han logrado combatir y hasta erradicar enfermedades infecciosas, tanto externas (heridas graves) como internas (neumonías, tuberculosis...), que hasta mediados del pasado siglo eran mortales de necesidad, como ocurre ahora con el sida. Muchas muertes antes del año Por poner un ejemplo, antes de que se conociera el potencial de la penicilina (1928), el Gobierno se había visto obligado a aplicar una Ley de Protección de la Infancia para niños menores de diez años, ya que una quinta parte de esa franja de la población perecía antes de cumplir el año por tuberculosis, problemas pulmonares vinculados a la «friura y humedad que tienen muchas viviendas y calles» y las viruelas, tal y como recoge la obra Vida y muerte en la ciudad de León , escrita por Ramón García y Ponce de León. Como referencia, la mayor parte de los niños menores de un año que perecen en la actualidad tenían una afección originada en el periodo perinatal. Envejecimiento caro Además de la aparición de los antibióticos, las mejoras de las condiciones higiénicas y alimentarias y otros avances de la medicina también han reducido notablemente la mortalidad, que ha pasado del 25% al 10%. Esa mayor esperanza de vida, sin embargo, está provocando un intenso envejecimiento de la población que, por otro lado, tiene consecuencias incluso económicas. Una de las variables que mejor puede medir esta tendencia es el gasto en medicamentos por persona. No existe una estadística que explique el consumo de fármacos en torno a los años 50, seguramente porque era mínimo a tenor de la escasísima oferta -hay que recordar que la primera dosis de penicilina utilizadas en España se consiguió de estraperlo-. Sin embargo, el mercado de productos farmacéuticos mueve en la provincia leonesa 91,7 millones de euros al año, según recoge el Anuario Social de la Fundación La Caixa 2004. Esto supone que el gasto por habitante es de 187,8 euros, cuando la media de España está en 173,4 euros.

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