El PSOE exige a Matas que aclare si estuvo en un burdel a costa del Gobierno
El PSOE exigió ayer a Jaume Matas que explique ante el Parlamento balear cuál fue su papel en la «noche de juerga» que pasó una delegación de su Ejecutivo en un club de alterne ruso a costa del erario público. El Gobierno autonómico pretendió dar por cerrado este asunto con una nota de disculpas difundida este jueves y la dimisión de uno de los dirigentes políticos que formaron parte de la expedición: el director del Instituto de Turismo, Juan Carlos Alía. Pero el primer partido de la oposición considera que no es suficiente y reclamó además el cese el conseller del ramo Joan Flaquer. A pesar de que éste ha negado que tanto él como Matas tuvieran algo que ver en el asunto, ambos encabezaban la comitiva que viajó a Rusia entre el 24 y el 26 de febrero para promocionar las islas. «Además -advirtió ayer la socialista Francisca Armengol-, Flaquer es responsable de la consellería que pagó las facturas correspondientes a los gastos en el club Rasputín . Los recibos Según aparece en unos recibos que obran en manos del Parlamento balear, la noche del 25 de febrero siete personas estuvieron en el citado local, cuya entrada se pagó con dinero público. Hasta el momento el único que ha reconocido que entró en el club es el dimisionario Juan Carlos Alía. La identidad del resto de los visitantes se desconoce, y desde el gobierno balear se pide que «se respete la vida privada de esas personas». Pero da la casualidad que la delegación oficial que viajó a Rusia para promocionar el turismo de Baleares la formaban siete personas, con Matas y Flaquer al frente. Alía defendió esta semana que se equivocó al incluir la factura del recinto entre los gastos oficiales del viaje. Cuando se conoció la noticia, el alto cargo reembolsó el importe íntegro de los gastos en el club de alterne y luego dimitió, no sin antes asegurar que entre quienes acudieron a tomar una copa al teatro erótico no se encontraban ni el presidente autonómico ni su conseller de Turismo. El propio Matas insistió el jueves en que él no acudió al club Rasputín y calificó el incidente de «error contable».