Tráfico cree una «catástrofe» la muerte de 21 jóvenes durante el fin de semana

«Es un desastre, una catástrofe y una calamidad». El director general de Tráfico, Pere Navarro, valoró de esta manera el saldo de 38 personas muertas, 21 de ellas jóvenes, en los 36 accidentes ocurridos el pasado fin de semana en las carreteras. Otras 22 personas resultaron heridas graves y 15 leves. Navarro, que espera que las medidas preventivas adoptadas por Tráfico tengan resultados positivos sobre la siniestralidad, dijo que España «no puede permitirse el lujo de mantener estas cifras». Pere Navarro destacó que, pese a la cifra de víctimas del fin de semana, en lo que va de verano han ocurrido un 8,5% menos de accidentes, mientras que las víctimas mortales se redujeron en un 9,5% respecto al mismo periodo de año anterior. Para el máximo responsable de la DGT, la siniestralidad es un «problema nacional», porque un país como España «no se puede permitir el lujo de mantener estas cifras de accidentes». El director de Tráfico mostró su esperanza en que a final de verano «obtengamos mejores resultados que el año pasado». De los accidentes en los que perdieron la vida menores de 30 años de años destacaron los ocurridos este domingo a las 4.30 horas en Belvís de Monroy (Cáceres), en el que murieron cuatro jóvenes al salirse el coche de la carretera y chocar contra un muro; el sucedido a las 7.30 horas en Playa de Aro (Gerona), donde perecieron tres jóvenes al sufrir una colisión lateral y salirse de la carretera; y el que se produjo a las 14.15 horas en Mérida (Cáceres), en el que fallecieron cinco jóvenes.