El CNI afirma que los detonadores se hallaron durante la mañana del 11-M

Los documentos del CNI exa-minados en sesión secreta por la comisión de investigación del 11-M dieron ayer un giro a las averiguaciones. El más relevante de los que se vieron es el que indica que tanto los detonadores como la cinta con versos coránicos que se hallaron en la furgoneta abandonada por los terroristas estaban a la vista desde el exterior y, por tanto, fueron detectados en la primera inspección ocular del vehículo en la mañana del día 11. Tanto el ex ministro Acebes en su día como los principales responsables policiales ante la propia comisión, aseguraron que esos objetos no se localizaron hasta pasadas las 15.30 del día 11, cuando la furgoneta fue examinada ya en la comisaría de Canillas. E incluso aseguraron que los detonadores no sólo no estaban a la vista sino que estaban dentro de una bolsa azul debajo del asiento del copiloto. Lo extraño es que de esa bolsa es de donde hasta ahora se creía que se habían sacado huellas que permitieron identificar al menos a uno de los autores. Contradicciones El informe del CNI avala lo declarado por el portero que vio a los terroristas y aseguró que oyó a la policía hablar de los detonadores ya por la mañana. La presencia de esos objetos era tan visible que lleva al CNI a concluir que la furgoneta «es en sí misma una reivindicación de los atentados» y por eso se dejó la cinta coránica a la vista. Pero lo extraño es que esa nota del CNI está fechada el día 16 de marzo, cinco días después de los atentados. Y se da la circunstancia de que el propio CNI elaboró una nota el día 11 -desclasificada por el Gobierno del PP- en la que sólo apunta a ETA como autora de la matanza. Igualmente, el documento del día 16 habla de la posibilidad de que terroristas suicidas intervinieran en la acción, una circunstancia que el propio CNI había descartado en otra nota del día 11, antes incluso de que finalizaran las autopsias. Entre los documentos entre-gados a la comisión figuran tres que advertían del riesgo para la seguridad que suponía el apoyo a la guerra de Irak.