El 65% de los chalecos reflectantes, obligatorios el sábado, no cumplen la normativa de seguridad
Alonso anuncia un cerco contra los causantes de accidentes de circulación
En lo que va de año, 1.878 personas han perdido la vida en las carreteras españolas
Alonso, minutos antes de su reunión con las víctimas de las carreteras
El ministro del Interior, José Antonio Alonso, se comprometió ayer a «reprimir a toda costa la violencia vial», por lo que apostó por la «tolerancia cero» hacia los conductores temerarios, como medida para acabar con los accidentes de tráfico, que en lo que va de mes se han cobrado la vida de 230 personas. Para evitar esta «sangría constante», el ministro hizo un llamamiento a los conductores para no coger el coche bajo los efectos del alcohol, el cansancio o la somnolencia, además de pedir colaboración a las industrias automovilística y de ocio y, sobre todo, prudencia a los jóvenes que salen de marcha por las noches. Alonso se comprometió con las asociaciones de víctimas de accidentes de tráfico a «reprimir a toda costa la violencia vial» y a ser inflexible con quienes ponen en peligro la vida y la integridad de las personas en las carreteras. En lo que va de mes de julio han muerto 230 personas en las carreteras, la misma cifra que el año pasado, aunque en todo el año ha disminuido en 199 personas el número de fallecidos, frente al mismo periodo del 2003. La velocidad inadecuada y la distracción del conductor provocaron la mitad de los 1.878 muertos en accidentes de tráfico ocurridos desde el 1 de enero de este año hasta el día de ayer, según un informe de la Dirección General de Tráfico. En este periodo hubo 1.623 accidentes que dejaron, además, 884 heridos graves y 806 leves. Nada seguros El 65% de los chalecos reflectantes que tendrán que llevar obligatoriamente todos los vehículos a partir del próximo sábado no cumplen con la normativa de seguridad. Según un informe del Race, la mayoría de estas prendas presentan fallos en los niveles de fluorescencia, menores del establecido, en el etiquetado y en el folleto informativo complementario. «Desconfíen del chaleco de 2 euros del mercadillo», dicen desde la DGT. Las multas por llevar el chaleco equivocado pueden alcanzar los 60 euros. El conductor que sale del coche en plena carretera por una avería se expone a un peligro: no se le ve. Por eso los chalecos serán obligatorios, porque permiten la visibilidad de la persona a 150 metros de distancia. Las cifras de siniestralidad demuestran su importancia ya que el 60% de los atropellos mortales se producen por insuficiente iluminación de la persona.