Trabajo renueva los permisos laborales de 100.000 extranjeros en tres semanas

Jesús Caldera subrayó que este logro es fruto de las medidas incluidas en el «plan de choque» aprobado por el Gobierno para desatascar la renovación de papeles de 375.000 extranjeros que, con toda su documentación en regla, corrían el peligro de convertirse en irregulares por la incapacidad de la Administración para resolver sus expedientes. Caldera demostró que tiene por costumbre mirar el calendario para cumplir los plazos. «En menos de 21 días, de ellos 16 laborables, -se ufanó- hemos conseguido resolver 100.000 expedientes». Gracias a la celeridad del proceso, continuó, se han mantenido «100.000 empleos y altas en la Seguridad Social». El ministro explicó que los números de julio son una primera etapa que tendrá su continuidad entre el 1 de agosto y 31 de diciembre. Entre ambas fechas caducan los permisos de trabajo y residencia de unos 200.000 extranjeros, y la Administración se pondrá en contacto con ellos para renovar sus documentos antes de que venzan. Caldera también destacó que se han resuelto los «permisos iniciales», los que se tramitan cuando un inmigrante inicia una actividad laboral, de 50.000 personas. Sostuvo que solucionar «en menos de un mes» tan cantidad de expedientes «es eficacia» y se comprometió a solucionar la situación de todos los extranjeros en situación regular que tienen que renovar sus documentos antes del 30 de septiembre. El ministro no desglosó las cifras por comunidades, pero subrayó que la Delegación de Cataluña solventó más de 42.000 renovaciones. También destacó la labor de las oficinas Murcia, Málaga, Alicante, Girona y Castellón. En un mes El titular de Trabajo alabó las bondades del plan de choque aprobado por el Ejecutivo en junio pasado y que permitió solucionar el colapso administrativo que impedía atender las renovaciones de extranjeros en situación regular que se acercaban a las ventanillas a renovar sus documentos y no podían ser atendidos por la insuficiencia de medios humanos y materiales. Este problema tenía a unos 375.000 inmigrantes al borde de la irregularidad sobrevenida en abril pasado. El Consejo de Ministros aprobó la contratación de 267 personas para desarrollar estas labores en las oficinas de extranjería de todo el país y resolver el atasco. Este plan de choque, anunció el ministro, se mantendrá y será «reforzado» con nuevas medidas y más personal con el objetivo de que los expedientes de renovación de documentos se resuelvan en un mes, aunque el plazo fijado en la ley es de un trimestre. La secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, completó las palabras de Caldera con el anuncio de que se va reunir con los delegados y subdelegados de Extranjería para redefinir el sistema de trabajo, crear un modelo de incentivos económicos para los trabajadores más eficaces y estudiar una mejor asignación de recursos humanos en las plantillas. Todo ello, añadió, con el objetivo de que la gestión sea más eficaz y cercana a los inmigrantes.