El crudo bate un nuevo récord pese al intento de la Opep de calmar al mercado

Una vez más, las medidas adoptadas por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep) se revelaron ayer insuficientes para poner freno a la espiral alcista de los precios del crudo, que amenaza con expulsar a la economía mundial de la senda de la recuperación. Menos de 24 horas después de que el cartel anunciara que está listo para bombear un millón más de barrriles al día, las dudas sobre la eficacia de este nuevo aumento se extendieron como la pólvora sobre las mesas de operaciones, devolviendo los precios del oro negro a zona de máximos. Tanto es así que el barril de crudo brent cerró en Londres a 41,12 dólares, cotización que supone un nuevo hito en la historia del mercado. Los analistas subrayan que la la Opep lleva meses produciendo por encima de sus cuotas sin que eso haya frenado al petróleo y dudan de que la situación vaya a cambiar ahora. La principal preocupación del mercado reside en que, en cualquier momento, pueda producirse una interrupción o un descenso en el suministro de crudo ante los problemas que atraviesan algunos de los principales productores del mundo. La situación es aún más complicada si se tiene en cuenta que la demanda -impulsada por la expansión económica de países como India o China- está creciendo al ritmo más alto de los últimos 16 años, según cifras de la Agencia Internacional de la Energía (AIE). Se calcula que sólo el próximo año la demanda de China crecerá en medio millón de barriles diarios. Temores Los expertos temen que la Opep, que se encuentra casi al 100% de su capacidad de producción, no sea capaz de atender estos incrementos, especialmente si algunos de los países del cartel se ven obligados a reducir su bombeo. Es el caso de Venezuela, por la inestabilidad política, y de otros países de Oriente Medio que están sufriendo ataques en sus instalaciones petrolíferas, como Irak o Arabia Saudí. Ayer mismo, en declaraciones al diario italiano Corriere della Sera, el ministro iraquí de Petróleo, Thamir Ghadhban, señaló que las instalaciones de Kirkuk atacadas a comienzos de esta semana requerirán al menos un año para su total reparación. Los sabotajes han mermado la capacidad exportadora de Irak en casi un 20%. A todo lo anterior habría que añadir los efectos que tendría sobre la oferta la bancarrota de la petrolera Yukos. Precisamente este último factor fue el que más espoleó ayer la cotización del petróleo, después de que la Justicia rusa decidiera revocar la decisión adoptada un día antes que autorizaba a la compañía a hacer uso de sus cuentas para financiar sus actividades diarias. De esta manera, tanto el dinero depositado en las cuentas de la petrolera como los ingresos que vaya perci-biendo irán destinados a pagar su deuda fiscal, que asciende a 3.400 millones de dólares (más de 2.800 millones de euros). Menos exportaciones El embargo de los recursos financieros de Yukos puede acabar desembocando en graves problemas para las exportaciones rusas. De hecho, la compañía ya ha advertido sobre un posible recorte de 1,6 millones de barriles al día, cantidad que supera la producción diaria de Libia. «Las perspectivas futuras no son optimistas» JOSÉ MONTILLA Ministro de Industria