Más de 60 millones para 282 kilómetros
El ferrocarril de la Vía de la Plata lo componían varias líneas: Astorga-Monfragüe, con una distancia de 282 kilómetros. Desde Monfragüe se comunicaba con Plasencia, a 15 kilómetros. Desde Plasencia a Mérida hay otra línea ferroviaria y y el tercer tramo de la Vía de la Plata discurría entre esta ciudad, Zafra y Sevilla. Los gobiernos autonómicos de Andalucía y Extremadura sostienen el funcionamiento deficitario de sus líneas que también fueron amenazadas de cierre en los años 80 cuando se apostó por el transporte de carretera y el ferrocarril quedó marginado, especialmente las líneas de comunicación trasnsversal. De hecho, en Extremadura el tramo hasta Baños de Montemayor funciona durante los meses de verano. No sucede lo mismo en Castilla y León donde se cerraron más de 800 kilómetros de vías en la citada década. «Aquí el PP se limitó a protestar y prometer que los reabriría si llegaba al poder», afirma Luis Aliste, del foro por el tren de la Vía de la Plata. Los zamoranos son los que más han luchado por la reapertura de la línea que, en su conjunto, requeriría unas inversiones superiores a los 60 millones de euros, según estimaciones del PSOE de Castilla y León. Hay que tener en cuenta que se trata de una línea sin electrificar, es decir, que los trenes tendrían que ser tipo diesel, los que antiguamente se llamaban ferrobuses, y por tanto no entraría dentro de la velocidad alta. No existen aún estudios en los que se evalúe el coste de la reapertura global.