Los ecologistas denuncian que el Ejecutivo cedió ante las industrias

Los ecologistas consideran que el Plan Nacional de Asignación de drechos de emisión es demasiado modesto en sus objetivos y ha sufrido cambios sustanciales desde que se presentó a la opinión pública. A su entender, el Gobierno se ha plegado a los intereses de la industria, como lo demuestran las pocas exigencias que se plantean a las empresas eléctricas. Para WWF/Adena, el documento que se presentó a debatido público ha sufrido modificaciones que autorizan más emisiones contaminantes. Según la organización, el texto original recogía un tope de emisiones de 161 millones de toneladas de dióxido de carbono al año. Después las emisiones se han elevado a 172,31 millones, «un aumento del 6,5 por ciento con respecto a la anterior cantidad». «Menos eficacia» Ecologistas en Acción alegó que el volumen de emisiones que concede el Gobierno de forma gratuita a las empresas «reduce mucho la eficacia de este sistema para frenar el cambio climático y cumplir el protocolo de Kioto». También afirmó que el documento fija un plazo de tres años para «estabilizar» las emisiones causantes de los gases que causan el efecto invernadero, al tiempo que se posponen todos los esfuerzos al periodo 2008-2012. Para la entidad, es muy «preocupante» el «generoso» tratamiento que se da al sector eléctrico, pues sus emisiones han crecido un 43% desde 1990 y es la actividad que genera más dióxido de carbono.