Dos años de prestaciones y subsidios y de ahí a una interminable lista de espera
Un drástico reciclaje profesional o el autoempleo son casi las únicas salidas para los desempleados de larga duración y mayores de 45 años, una edad que se considera como «barrera» para competir en el mercado laboral. Según el secretario provincial de Unión General de Trabajadores, Ramón Sánchez, «en unos casos se trata de hombres que, de golpe, se quedan sin empleo después de haber trabajado veinte años o más en la misma empresa y ,en otros, de mujeres que, una vez con hijos mayores, intentan reincorporarse al mercado de trabajo tras abandonarlo de jóvenes para atender a sus familias. En ambos casos la reentrada es dura, incluso más que para los jóvenes que buscan su primer empleo, y provoca no pocos quebraderos de cabeza en los servicios de asistencia de los sindicatos. Según Silvia Suárez y Carlos Vallaure, responsables de la oficina de OPEA-UGT, a sus despachos llega aproximadamente una décima parte de los parados más veteranos, de modo que debe suponerse que el resto intentan rehacer su vida laboral por libre sin acudir a los sindicatos, se apuntan en las agencias u oficinas de trabajo temporal (ETT) o, simplemente, renuncian a seguir buscando. «Fomentar el interés por encontrar un empleo y motivarlos para ello es, precisamente, uno de los problemas». Según las mismas fuentes, el reciclaje hacia otras profesiones no es fácil, «especialmente teniendo en cuenta un nuevo fenómeno, que es el de la informática, que asusta a no pocos de ellos», especialmente después de haber trabajado décadas enteras con sistemas o herramientas tradicionales. En otros casos los parados de larga duración se limitan a pedir asesoramiento en los sindicatos sobre cómo sortear los últimos años de su vida laboral y acaban derivando hacia trabajos de autoempleo, da igual la actividad, según Ramón Sánchez. «Casi siempre se trata de montar pequeños negocios que apenas requieran inversión, pero que permitan ir tirando hasta cubrir las cotizaciones a la Seguridad Social para prejubilarse a los sesenta años, y el Inem ya permite cobrar el subsidio del paro de una sola vez, pagando un 20% en metálico y el resto en cotizaciones».