La Junta promete a los agricultoresuna valoración urgente de los daños

La Junta de Castilla y León comenzó ayer por la mañana a recabar los primeros datos sobre los daños de las tormentas del pasado fin de semana en los cultivos de León, Burgos y Valladolid. El consejero de Agricultura, José Valín, ordenó a los jefes de su departamento de Agricultura en estas provincias que elaboren un informe urgente con los daños de las fuertes lluvias y el granizo en distintas zonas agrícolas. Valín precisó que la normativa nacional no prevé ayudas de la Administración para cultivos para los que existen seguros agrarios, porque en principio «lo que es asegurable, no es subvencionable». No obstante, la Junta llevará a cabo «los estudios oportunos» en las zonas afectadas para analizar la posibilidad de ayudas extraordinarias en casos «excepcionales». Quejas de los sindicatos Por su parte, los sindicatos agrarios leoneses no han dejado pasar ni un día para denunciar «la desprotección» en la que se encuentran los agricultores ante la falta de respuesta de los seguros. Asaja, a través de un comunicado, asegura que muchos de los agricultores afectados no tienen seguros contratados por su excesivo precio, por lo que pide «medidas excepcionales» por parte de la Administración. La organización Coag reclamó una «tasación rápida y precisa» como primer paso para paliar las pérdidas ocasionadas por el pedrisco tanto en los cultivos como en la maquinaria y en las instalaciones agrícolas, que también han sufrido serios daños.