Detienen a un presunto colaborador de ETA en La Bañeza y a cuatro en Vizcaya

Efectivos de la Comisaría General de Información y de la Jefatura de Bilbao de la Policía Nacional detuvieron ayer en Vizcaya y León a cinco presuntos colaboradores del aparato de «mugas» (fronteras) de ETA. Los detenidos estaban dedicados a dar «cobertura a los terroristas huidos para pasar a Francia» y recibir a los activistas «liberados» de regreso a España. La operación -coordinada por el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu- tuvo como escenario las localidades vizcaínas de Arrigorriaga y Berango y La Bañeza en León. Los detenidos en Arrigoriaga son Amaia Ibarra, de 28 años; Josu Alvarez Pérez, ex dirigente de Gestoras Pro Amnistía en Basauri (Vizcaya), de 34; y José Ángel Aranguren, de 30. En su domicilio de Berango fue capturado Oskar Elezeaga, de 21 años, mientras que Francisco Javier Ganuza Murgiondo, de 34 años, fue arrestado en un hotel de La Bañeza donde se encontraba de paso. Los arrestados -todos ellos nacidos en el pueblo vizcaíno de Basauri- fueron traslados de inmediato a dependencias de la Comisaría General de Información en Madrid para su interrogatorio y a la espera de ser puestos a disposición judicial. Además de las detenciones, los agentes llevaron a cabo durante la madrugada diversos registros en domicilios de la calles Lombo y Severo Ochoa de Arrigoriaga, en una vivienda del paseo Tanteltxu de Berango y en una cuarta casa en la localidad vizcaína de Sopelana. Los funcionarios se incautaron de teléfonos móviles, agendas de contacto y direcciones, cartas de miembros de ETA y «abundante material documental y soportes informáticos». Hace cuatro años Los expertos de la Comisaría General de Información sostienen que el «talde» desmantelado llevaba operativo en Vizcaya desde hace más de cuatro años y que además se ocupaba del traslado de material, armas y explosivos desde Francia al País Vasco. Las investigaciones policiales comenzaron a raíz de que la Audiencia Nacional condenara en junio del 2000 a 17 años de prisión a Francisco Javier Sádaba Merino, Iñigo Vallejo Franco, Zigor Orbe Sevillano, Jon López Gómez y Leire Etxebarria Simarro, por el incendio provocado de un autobús que causó graves lesiones a su conductor en Basauri. Los cuatro condenados, al conocer el fallo, lograron huir precipitadamente ayudados por una hasta entonces desconocida infraestructura de la que se sospecha que podían formar parte los detenidos en Vizcaya y León. Los agentes han llegado a la identidad de los arrestados gracias al análisis de la abundante documentación incautada en Francia en diciembre del 2002 al dirigente de ETA Ibon Fernández Iradi, Susper , quien consiguió escapar de una comisaría de la policía gala y que fue nuevamente arrestado un año después. El papel del «talde» desmantelado en la operación ha sido «decisivo» para lograr durante los últimos años que miembros de la violencia callejera dieran el salto a Francia para incorporarse a la banda terrorista como activistas liberados (fichados y a sueldo de la organización).