División de opiniones sobre la extradicion del jefe de la banda

¿Podrá ser extraditado el jefe de ETA a España? Es una pregunta que divide a los juristas. El fiscal de la Audiencia Nacional Ignacio Gordillo fue tajante ayer: no procede. Al menos de momento, porque está procesado en Francia por asociación de malhechores, un delito equivalente a pertenencia a banda armada en España, que es de lo que podría acusarle Baltasar Garzón por el sumario del caso Kas-Ekin. En el futuro sería posible si de los documentos incautados se le pudiera imputar por otros tipos penales por los numerosos atentados cometidos en España desde su acceso al poder de la banda en 1994. El portavoz de Jueces para la Democracia, Edmundo Rodríguez, considera que «lo fundamental es que si hasta ahora no ha habido ninguna petición concreta de búsqueda de Antza es difícilmente justificable solicitar la extradición a Francia y, además, en Europa no se puede juzgar a alguien dos veces por el mismo delito». Sí es posible José Manuel Suárez Robledano, portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura, asegura que Antza podría ser juzgado en España por aso-ciación ilícita como jefe de «la banda criminal». Por ello, es posible pedir su extradición. En Francia, afirma, se le juzgaría según su Código Penal por los hechos delictivos cometidos y en España, según el español, por los acaecidos aquí. Para el ministro de Justicia, Fernando López Aguilar, cuando una persona pertenece a una organización terrorista, se están cometiendo delitos todo el tiempo. López Aguilar explicó que España y Francia tienen suficientes instrumentos de cooperación bilateral para afrontar este tipo de situaciones. De hecho, recordó que hay acuerdos que permiten la «cesión jurisdiccional» del detenido para proceder a su interrogatorio, lo que permitiría la apertura de un sumario paralelo en nuestro país.