Rajoy exige a los suyos que no den «espectáculos poco edificantes»

Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz-Gallardón mantienen intacto su pulso. Ni en la reunión restringida de la dirección, los llamados «maitines», en los que participó Gallardón, ni en la posterior del Comité Ejecutivo Nacional, en la coincidieron el regidor y Aguirre, se abordó la grave crisis del PP de Madrid. Nadie mencionó siquiera un conflicto que ha llegado a unas cotas desconocidas en el partido, en el que no han faltado las discusiones públicas y las descalificaciones personales. La presidenta regional y el alcalde no pidieron la palabra para abordar el asunto ante sus compañeros de la dirección nacional. Por su parte, Mariano Rajoy se limitó a echar un rapapolvo a los dos contendientes en la llamada «batalla de Madrid», aunque sin nombrarlos. Según declaró en una rueda de prensa posterior a las reuniones, Rajoy pidió, en general, a los dirigentes del partido que «no den espectáculos poco edificantes», en una clara referencia a los enfrentamientos dialécticos que protagonizaron la presidenta de la comunidad, el alcalde de Madrid y el secretario general, Ángel Acebes, durante los actos de celebración de la Fiesta Nacional. Sentido común También les advirtió de que no hagan afirmaciones «de las que luego vayan tener que arrepentirse a las 72 horas». Y les pidió que antes del congreso regional hablen entre ellos, actúen «con sentido común, finura y generosidad» y atiendan a los intereses generales. Rajoy no se decantó ninguna de las candidaturas -la de Aguirre y la de Cobo-, aunque dijo que respaldaba a Acebes. Tras la intervención de éste ante la ejecutiva, en la que expresó su deseo de que los congresos regionales se desarrollen con normalidad y que los distintos candidatos lleguen a acuerdos de integración, el presidente nacional afirmó que estaba totalmente de acuerdo con lo dicho por el secretario general. Algo que los asistentes interpretaron como un claro refrendo a la actuación de su «número dos», cuya autoridad había puesto en entredicho Gallardón. El líder popular afirmó que la situación de Madrid «no afecta para nada a la unidad del partido» y que la existencia de dos listas «no es necesariamente negativa». Lo importante, dijo, es que las cosas vayan bien tras el congreso. Asimismo, señaló que no había hablado sobre el asunto con los dos protagonistas. Abierto al diálogo Por su parte, Gallardón aseguró que sigue abierto al diálogo, pero que dada la ausencia de respuesta positiva de Aguirre a sus propuestas de encuentro, cree que habrá dos candidaturas en el próximo congreso regional. El regidor destacó el «respeto escrupuloso» de la dirección del partido por lo que denominó «proceso democrático interno» en el PP madrileño. En referencia a la discusión que mantuvo con Ángel Acebes durante la audiencia real dijo que «en ningún momento hubo tensión dialéctica». Ayer ambos se reunieron de nuevo en un clima tenso. Esperanza Aguirre aseguró que aún es posible lograr una lista de integración, en la que la minoría «se sienta cómoda y representada». «Si no se logra, normalidad y democracia», sentenció. Los partidarios de la presidenta aseguran que ésta estaría dispuesta a aceptar a un secretario general próximo a Ruiz-Gallardón, pero en ningún caso a Manuel Cobo, porque eso sería interpretado como un triunfo de la imposición del alcalde. «He pedido a todo el mundo que no se digan y no se hagan cosas de las que uno pueda arrepentirse» MARIANO RAJOY Presidente del PP «Cuento con todos, quiero hacer una lista donde todo el mundo tenga su sitio, por eso no he avanzado nombres» ESPERANZA AGUIRRE Presidenta de Madrid «Los espacios que hemos abierto con Aguirre no han recibido respuesta. En esa situación, habrá dos candidaturas»» ALBERTO RUIZ-GALLARDÓN Alcalde de Madrid