El coordinador antiterrorista de la Unión Europea tampoco ve lazos entre los islamistas y ETA

Tres veces preguntaron los comisionados del 11-M al coordinador de la Unión Europea para la lucha antiterrorista sobre los vínculos entre ETA y los grupos islamistas radicales, y las tres veces respondió que no tenía el menor indicio de esa relación. El holandés Gijs de Vries alertó además de que Al Qaida y otros grupos terroristas fundamentalistas no sólo utilizan las mezquitas y la cárceles para reclutar adeptos sino que también se aprovechan de la red de Internet. «Por decirlo de forma breve: no», respondió el coordinador antiterrorista de la UE al diputado socialista Antonio Hernando, quien se interesó por los presuntas lazos entre ETA y el terrorismo islamista. Antes dijo lo mismo a preguntas de los nacionalistas catalán Jordi Jané y vasco Emilio Olabarria. De Vries aseguró no tener «ninguna información» sobre esos vínculos, y advirtió que para establecer un nexo entre el fundamentalismo islamista y ETA se necesita algo más que rumores. Es preciso, afirmó, tener «pruebas claras e irrefutables y no las tenemos» y, en consecuencia, «especular» en este terreno carece de sentido. El experto de la UE sostuvo ante la comisión parlamentaria que la amenaza de nuevos atentados como los del 11-M «sigue ahí» y el riesgo es «real y grave». Riesgos El terrorismo islamista, prosiguió, es un «fenómeno a largo plazo» que no va a desaparecer «en poco tiempo» sino que será parte de «nuestra realidad por un periodo largo». El riesgo afecta a todos y «ningún país -dijo- puede sentirse inmune», sea europeo o árabe. De Vries no quiso atribuir a la guerra en Irak el repunte de la actividad de grupos como Al Qaida y similares, pero reconoció que sirve de alimento «ideológico» a los terroristas y, al mismo tiempo, «azuza» a los elementos más radicales. El conflicto iraquí, en opinión del alto cargo de la UE, facilita también el reclutamiento de potenciales terroristas que son captados, sobre todo, en cárceles y mezquitas, pero también a través de las nuevas tecnología al alcance en internet. Anunció que para finales del 2005 la Comisión Europea tendrá diseñada una estrategia de lucha contra el reclutamiento de radicales en los 25 países de la Unión Europea.