Destituido el jefe de la Guardia Civil de Gijón por retener pruebas
El Gobierno destituyó ayer al teniente coronel José Antonio Rodríguez Bolinaga como jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Gijón por ocultar una cinta que contenía revelaciones sobre la trama de los explosivos de Asturias. Es el primer mando de las fuerzas de seguridad apartado en el curso de las investigaciones del 11-M. Bolinaga retrasó un mes la entrega al magistrado de una grabación realizada por el guardia civil Jesús Campillo el 28 de agosto del 2001, en la que un confidente apodado Lavandero o El serpiente explicaba que el ex minero Emilio Suárez Trashorras y su cuñado Antonio Toro tenían grandes cantidades de explosivos y buscaban a alquien que supiera «montar bombas con teléfonos móviles». El ministro del Interior, José Antonio Alonso, explicó que el cese se debe a la «quiebra del principio de confianza». Rodríguez Bolinaga es un mando con fama de duro, de lo que da idea que 100 integrantes de la tropa a su mando estuvieron de baja psicológica al mismo tiempo. Al teniente coronel no se le priva de empleo y sueldo y queda pendiente de que se le asigne un nuevo destino. Pero el Ministerio del Interior mantiene abierta una investigación para determinar por qué no entregó la cinta de forma inmediata. Si se determina que Bolinaga ordenó esconder la cinta podría ser retirado del servicio e imputado. Declaración El agente Campillo, del Servicio de Información de la comandancia de Gijón, declaró ayer ante el juez Juan del Olmo que entregó a sus superiores la casete y que se abrió una investigación al respecto. Sin embargo, dijo que él fue apartado de la misma y no sabe en qué quedó todo. La grabación a Francisco Javier Villazón Lavandera, auténtico nombre del informante, se extravió y fue hallada a mediados del año pasado por otro guardia civil, David Robles, en un cajón del puesto que el instituto armado tiene en la localidad asturiana de Cancienes. El pasado 16 de octubre, Robles se la dio a sus mandos. Del Olmo también tomó declaración ayer a Lavandero. El +presidente del PP, Mariano Rajoy, pidió ayer al Gobierno que adopte medidas» si es cierto que «se ha ocultado información». El coordinador del PP en la comisión del 11-M, Vicente Martínez-Pujalte, aseguró que la destitución de Rodríguez Bolinaga evidencia que el PP «no estaba haciendo denuncias en falso» y que el Gobierno socialista debe «investigar en serio y en todas las direcciones». El portavoz del PSOE, Álvaro Cuesta, dijo que es el PP el que debe explicar por qué no investigó qué sucedió en las Fuerzas de Seguridad para que no se llegase al fondo de las denuncias sobre la trama asturiana de explosivos.