Subdelegado del Gobierno en León
«Tramitar los documentos no tiene por qué durar más allá de un mes»
«Es mentira que los musulmanes no se integren y la prueba son, por ejemplo, los mineros pakistaníes de Bembibre» 2 líneas
Según el subdelegado del Gobierno en León, Francisco Alvarez, la lista de inmigrantes que esperan su regularización en León puede ser de 2.000, como estima UGT, o incluso más, pero este número no debe plantear problemas ni en su inmensa mayoría deberán esperar a que la nueva normativa entre en vigor en febrero, porque muchos ya cumplen los requisitos necesarios con la actual. Tampoco es un problema, según él, la integración de colectivos de otras culturas, por ejemplo las de raíz islámica, cuya presencia «no es nueva en la provincia y ahí están los mineros pakistaníes de Bembibre». Al subdelegado todo le parece «normal». -¿Tampoco la próxima avalancha de 2.000 inmigrantes en la provincia es preocupante? -De esos 2.000 especientes que pueden estar sin resolver la mayoría no tienen que esperar seguramente a ningún futuro decreto. Se están resolviendo cada semana del orden de cien o un número parecido, pero esa es la entrada y el tránsito normal de ciudadanos extranjeros. En León, por lo menos, no veo ningún problema específico ni especial. En esta provincia no sería necesario aplicar ninguna solución especifica de ningún decreto especial: simplemente los inmigrantes regularizan su situación a medida que van cumpliendo los plazos. -Un 15% de los inmigrantes ya regularizados en la provincia de León son colombianos y un 10% marroquíes, mientras que el resto pertenecen a nacionalidades muy minoritarias. ¿Le dan más problemas de seguridad u orden público que la población local? -No; se trata de personas que residen aquí de forma perfectamente legal con el correspondiente permiso de trabajo y no suponen ningún problema. Se limitan a hacer una vida normal. -Se va a crear una «ventanilla única» para inmigrantes. ¿Qué puede ofrecer, aparte de abreviar el papeleo? -Queremos ponerla en servicio antes de una semana. El objetivo es tener una base de datos lo más completa posible y, sobre todo, agilizar los trámites, de modo que un expediente pueda resolverse en un mes y no en tres o cuatro, como sucede ahora. Se trata de que la gente no tenga que ir de un sitio a otro cuando es factible arreglarles los papeles en una sola oficina. -Días atrás ha habido problemas de convivencia de reclusos en la cárcel de Mansilla. ¿Ha tenido muchas quejas de los sindicatos de funcionarios? -No, porque el funcionamiento del centro depende directamente de la Dirección general de Instituciones penitenciarias. -Ahora mismo hay en la provincia una población extranjera de casi 11.000 personas, dos tercios de países extracomunitarios. ¿Se ha producido algún caso de racismo, en brote o aislado? -No ha habido ninguno, ni siquiera en las barriadas donde suelen agruparse. Ni brotes ni casos aislados, por lo menos en el tiempo que llego aquí como subdelegado no ha habido necesidad de ninguna intervención policial. -La inmigración hispanoamericana se integra rapidamente por razones de cultura y lengua. ¿Pero puede decirse lo mismo de la de países musulmanes? -Lógicamente se integran peor, porque no dejan de constituír sociedades un poco más cerradas. Pero tenemos el caso, por ejemplo, de los pakistaníes en Bembibre, que es un ejemplo paradigmático de una integración que no ofrece ningún problema. Conviven las culturas perfectamente, aunque sean diferenciadas. -¿Qué mecanismos policiales o de otro tipo hay para controlar el número de los «sin papeles»? La policía no va a patrullar la calle pidiendo la documentación a sospechosos... -Hombre, hay mil formas y oportunidades, desde inspecciones de trabajo, que son muy habituales en cualquier empresa, hasta situaciones de ciudadanos en estado de necesidad o abandono que aparecen en la calle o en una situación no muy común... Cuando alguien se encuentra en estas circustancias lo normal es que la gente se preocupe, nos avise y quela policía también se interese, por ejemplo, por él. -¿Que un porcentaje muy elevado de la población reclusa en las cárceles sea extranjera tampoco es preocupante? En en la de Mansilla debe ser un tercio del total... -No recuerdo de memoria exactamente el porcenteje, pero quizá sea un poco más. ¿Cómo puede valorarse? Es la situación que hay. ¿Preocupante? Hombre, habrá que arbitrar alguna medida de desplazar un poco más a los reclusos para que no se concentren en los mismos sitios, crear más prisiones, políticas de dispersión, etcétera, pero insisto es que la situación es la que és. -Una de las comunidades más numerosas es, anecdóticamente, la china, con cerca de 500 personas. ¿A qué se dedica? -Imagino que unos habrán puesto un restaurante y otros tendrán alguna clínica de medicina oriental, pero eso es también lo más normal.