Diario de León

La fiscalía asturiana ve «indicios claros» de delito en la actuación de las fuerzas de seguridad

El fiscal investiga si la Guardia Civil de Asturias ocultó pruebas del 11-M

Cándido Conde Pumpido cree que pudo haber obstrucción a la Justicia

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Gonzalo Bareño - redacción | madrid
León

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El Fiscal General del Estado, Cándido Conde Pumpido, ha ordenado a la fiscalía asturiana que investigue la actuación de la comandancia de la Guardia Civil de Gijón respecto a la cinta en la que el confidente Lavandero alertaba en el 2001 de que unos delincuentes querían fabricar bombas con teléfonos móviles como las usadas en el 11-M. Conde Pumpido afirmó que la ocultación de la cinta, por la que ha sido cesado el teniente coronel José Antonio Rodríguez Bolinaga, podría constituir un delito de ocultación de pruebas u obstrucción a la Justicia. El fiscal general aclaró que la investigación será «autónoma» respecto a la que lleva a cabo la comisión del Congreso, ante la que ayer declaró el propio Rodríguez Bolinaga. Sin embargo, el PP adelantó que pedirá que se remitan a la Fiscalía las declaraciones de cargos de la Guardia Civil ante la comisión al encontrar contradicciones entre lo declarado respecto a las investigaciones sobre la trama de robo de explosivos Alcande la investigación El fiscal jefe de Asturias, Gerardo Herrero, adelantó que en las informaciones sobre este asunto se observan indicios «muy claros» de delito. Herrero indicó que la investigación comenzará hoy mismo y que «de momento» no se llamará a declarar al general Pedro Laguna, entonces coronel y máximo responsable de la Guardia Civil en Asturias. Herrero defendió la actuación de su antecesor en el cargo, Rafael Valero Oltra, respecto a la información que en el 2002 facilitó el abogado de otro confidente sobre un supuesto zulo de explosivos robados por Suárez Trashorras y Toro, dos de los implicados en el 11-M. «La información que se nos dio en aquel momento era una información muy escasa», dijo para justificar la escasez de resultados de aquella investigación fallida. El inicio de las pesquisas fiscales coincidieron con la declaración ante la comisión parlamentaria que investiga el 11-M del coronel de la Guardia Civil Luis Antonio Burdalo, jefe de zona de Asturias desde el pasado 28 de octubre.

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