Berlusconi presidirá hoy en Cuenca la cumbre hispano-italiana
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y su homólogo italiano, Silvio Berlusconi, presidirán hoy en Cuenca la duodécima cumbre hispano-italiana, en la que analizarán la ratificación de la Constitución Europea e intentarán reforzar unas relaciones bilaterales «ya privilegiadas». La primera cumbre hispano-italiana desde la llegada a la Presidencia de Rodríguez Zapatero tendrá como tema de debate estrella el nuevo texto constitucional y la importancia del mismo para el futuro de la UE y estará marcada por «la buena química» entre ambos mandatarios, detallaron fuentes del Gobierno. Además de Zapatero y Berlusconi, participarán en este encuentro los ministros de Asuntos Exteriores; Defensa; Interior; Industria, Turismo y Comercio; Cultura; y Trabajo y Asuntos Sociales. Pese a las diferencias en asuntos como la guerra en Irak, Zapatero y Berlusconi mantienen una «estupenda química» que se traduce, según las mismas fuentes, en un entendimiento ante asuntos europeos como el de la Constitución Europea y la importancia de que ésta sea aprobada o ratificada por todos los Estados miembros. Pioneras Tanto Zapatero como Berlusconi han mostrado su deseo de que España e Italia sean pioneros en la aprobación del texto. El mismo día en que se firmó en Roma la Constitución -29 de octubre- el Consejo de Ministros italiano aprobó un proyecto de ley para la ratificación en el Parlamento italiano del citado texto. Berlusconi anunció que pretende que Italia sea el primer país de la UE que ratifique el Tratado Constitucional Europeo y se mostró convencido de que será aprobado en el Parlamento italiano. El propio Berlusconi anunció que pretende que Italia sea el primer país de la UE que ratifique el Tratado Constitucional Europeo y se mostró convencido de que será aprobado en el Parlamento italiano «con una amplísima mayoría». España ha elegido la fórmula del referéndum y lo celebrará el 20 de febrero, siendo así el primer país que lo haga. Esta coincidencia sobre asuntos europeos ya se puso de manifiesto el pasado mayo en Roma, en un reunión entre ambos presidentes y tras la que Rodríguez Zapatero defendió que la firma de la Constitución Europea tuviera lugar en la capital italiana.