MANIFIESTO
«Made in» condiciones de esclavitud
La protesta sindical contra la liberalización y globalización del mercado textil tiene como telón de fondo, además de la desaparición pura y dura de puestos de trabajo, la proletarización del resto de los supervivientes, una palabra que ya no se oía en la Europa desarrollada desde comienzos del siglo pasado. La única forma de competir con la agresividad de la oferta asiática sería, según los sindicatos, rebajarse a las mismas bajas calidades de empleo que ellos, lo que no resulta aceptable. El manifiesto de los sindicatos europeos para que se ponga freno a la importación indistriminada y libre de productos chinos o indios, que espera recoger millones de firmas, exige «el respeto a las normas fundamentales del trabajo en el mundo, especialmente los derechos de asociación sindical y negociación colectiva, el rechazo al trabajo infantil y el reconocimiento del derecho a salarios y condiciones laborales dignas, así como criterios de reciprocidad en el comercio mundial».