Adiós a los tratamientos de «ilustrísima» y «excelentísimo» para los miembros del Ejecutivo
El Código para el Buen Gobierno del Gobierno apea de los tratamientos protocolarios a los miembros del Ejecutivo y altos cargos institucionales. Se acabaron «su excelencia» y el «ilustrísima». A partir de la entrada en vigor de este código ético el próximo año, todas las apelaciones pomposas o solemnes serán sustituidos por «señor y señora» seguida de la denominación del cargo. Los altos cargos, razonó el ministro de Administraciones Públicas, «son ciudadanos y tiene que ser tratados como tal», La medida no afectará, sin embargo, a otras instancias de los poderes del Estado que mantendrán su tratamiento. Los representantes en el Congreso y el Senado mantendrán las apelaciones de «su señoría», mientras que los jueces y magistrados seguirán con el trato de «ilustrísimos o ilustrísimas», y si pertenecen a las más altas instancias, «excelentísimos o excelentísimas». Lo mismo ocurrirá con la Casa Real. No variará el tratamiento de «majestad» para los Reyes, y «altezas» para los príncipes de Asturias y las infantas. Jordi Sevilla, precisó que el «Gobierno regula al Gobierno» y no tiene «competencia, capacidad ni voluntad de ir más allá».