Una sede en busca de destino
Dos tasaciones fijarán el precio del edificio que alberga el Banco de España, que pasará a ser propiedad de Patrimonio y será ocupado previsiblemente por una administración
Aspecto de una de las dependencias del Banco de España de León, con pocos papeles y menos empleados
Hace aproximadamente un año y medio el Banco de España llegó a un acuerdo con la Dirección General de Patrimonio, para que ésta última adquiriese los edificios que albergan a las sucursales de la entidad central. Según explicaron ayer los responsables del banco, en las próximas semanas se realizarán dos tasaciones con las que se fijará el precio final que pagará la Administración por el inmueble leonés, cuyo destino será previsiblemente albergar algún edificio administrativo, aunque este extremo aún no ha sido confirmado. Carlos Díaz Güell destacó ayer que, al margen de las conjeturas y candidaturas a ocupar el edificio de Ordoño II que se han presentado (como la sede del Procurador del Común o la Delegación de Hacienda), el destino del inmueble no tiene por qué decidirse inmediatamente. De hecho, algunos de los edificios que se cerraron como sucursal del Banco de España hace dos años siguen aún sin un destino claro. En el caso de la sucursal leonesa, está declarada Bien de Interés Cultural. El banco abrió su primera oficina en la capital el 15 de octubre de 1886, entonces en el número 26 de la Plaza Mayor, esquina a la calle Santa Cruz y con fachada a la Puerta del Sol. El local fue alquilado a Eusebio Campo. Diez años más tarde el banco amplió sus oficinas y se trasladó al palacio del Conde Luna, arrendado a María Álvarez Carballo. La primera sede propiedad del Banco de España se inauguró el 1 de enero de 1902 en la calle Sierra Pambley, entonces calle Bayón, en la esquina con Dámaso Merino. Fue un edificio diseñado por el arquitecto Manuel de Cárdenas, y es actualmente una de las sedes del Museo de León. El crecimiento de la ciudad hacia el ensanche provocó que el banco buscase una nueva ubicación, esta vez en el edificio que ocupará hasta el próximo día 31, en el número 29 de Ordoño II. Para construirlo se compró y derribó en 1946 el chalé del doctor Paco Sanz; y se reedifició con los planos del arquitecto José Yarnoz Larrosa. La nueva sede se inauguró en 1950. El primer director de la sucursal fue Vicente Gullón Iglesias; y los miembros del consejo de administración fueron Pablo Flórez Hergues, Mariano Andrés, Francisco Fernández Llamazares y Dámaso Merino Villarino. Funciones actuales En los últimos años las funciones de la sucursal del Banco de España en León se habían limitado mucho. De hecho, la mayor parte de las actividades se centraban en cambiar las pesetas que aún encontraban los leoneses en casa por euros: una tarea que había descendido sensiblemente, pero que aún generaba alrededor de veinte visitas diarias. En los últimos meses los trabajadores de esta sucursal se han puesto en contacto con sus clientes para comunicarles el cambio que deben realizar, y lo han hecho personalmente. Las cuentas corrientes y depósitos (no de particulares ni de empresas, que hace años que no trabajan con este banco) pasarán a otra sucursal o a la oficina central, así como la Deuda Pública. En realidad, la mayor parte de las operaciones que los clientes realizaban en la oficina de León pueden realizarse ya en la actualidad a través del correo y, sobre todo, de la página web de la entidad. Las nuevas tecnologías han cambiado radicalmente las funciones de esta entidad central.