El PP usará la campaña del referéndum para criticar la política de Moratinos Leopoldo Basagoiti, nuevo presidente del PP vizcaíno

El PP apuesta claramente por el «sí» en el referéndum sobre la Constitución Europea, pero endosa al Gobierno la responsabilidad de llamar a votar a los ciudadanos y se negará a participar en actos conjuntos con el PSOE, como en un principio había previsto. La ruptura de relaciones entre los dos partidos, como consecuencia de la crisis desatada tras las declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, llevará al primer partido de la oposición a diseñar su propio recorrido electoral, al margen del PSOE. Mariano Rajoy aprovechará la campaña previa a la consulta para criticar la política exterior del Gobierno. «Sí a Europa» es el lema de la campaña que va a desarrollar el PP para apoyar la Constitución europea con una inversión discreta y perfil bajo. Rajoy ha dejado claro que su partido defenderá el voto afirmativo en el referéndum de febrero aunque para ello tenga que dar muchas explicaciones a su electorado que, en un principio, no está muy predispuesto a abrazar un tratado constitucional que el anterior Gobierno criticó. «Nosotros defenderemos el sí, pero es el Gobierno el que tiene que movilizar a los ciudadanos para que acudan a votar», señala el portavoz del Grupo Popular Europeo, Gerardo Galeote, que recuerda que fue el presidente Rodríguez Zapatero quien decidió, por su cuenta, convocar la consulta para ratificar el tratado. Todas las fuentes del PP consultadas descartan cualquier posibilidad de organizar conjuntamente con el Gobierno el recorrido de la campaña y el contenido de la misma, tal y como pretendían Rajoy y la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega antes de la crisis. El PP prepara una gira intensa electoral en la que participarán su líder y los miembros del grupo parlamentario europeo, y que les llevará a ciudades de tamaño intermedio. Con esta campaña, el PP intentará mejorar su presencia en estas poblaciones, que siempre han sido sus puntos negros, y las autonomías en las que se celebrarán próximamente, elecciones autonómicas, como Galicia y el País Vasco. Los expertos electorales del partido aseguran que las encuestas auguran una bajísima participación que, según sus estudios, no alcanzaría ni al 35% del electorado.