Muere un hombre de 80 años en Cuenca al venirse abajo su edificio por una explosión de gas

Un hombre de 80 años de edad murió ayer en Cuenca al derrumbarse el inmueble en el que vivía como consecuencia de una explosión por un escape de una bombona de gas. El suceso ocurrió pasadas las tres de la madrugada cuando una fuerte explosión provocó el derrumbe de un inmueble de dos plantas situado en el número 1 de la calle Larga, en el barrio del Castillo ubicado en pleno casco antiguo de Cuenca. En ese momento tres personas se encontraban en el interior del edificio: el anciano que resultó muerto y un matrimonio que sufrió heridas de pronóstico reservado por politraumatismos. La mujer, de 35 años, fue evacuada rápidamente al hospital Virgen de la Luz de Cuenca donde ingresó en estado grave con un fuerte traumatismo facial al igual que su marido, de 38 años, que sufrió un traumatismo torácico menos grave. No obstante, según fuentes hospitalarias, los dos heridos se encuentran fuera de peligro y evolucionan favorablemente tras ser intervenidos. El único fallecido en este siniestro, de nombre Ramón, vivía solo en la planta baja del inmueble y su cadáver fue rescatado bajo los escombros hacia las 10 de la mañana, cuatro horas después de que los bomberos de la capital conquense iniciaran las labores de su rescate. «Las tareas de desescombro han sido difíciles porque ha habido que hacerlas a mano pero al final los bomberos han encontrado al anciano que, al vivir en la planta baja de la vivienda, ha sido el que ha sufrido mayores consecuencias», indicó al respeto el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Cuenca, Javier Priego. La tragedia pudo ser mayor ya que en la zona abundan los restaurantes y los bares que a la hora de la explosión aún tenían clientes.