Rajoy da marcha atrás y comunica que no apoya la reforma de la Constitución

«España es una Nación, no una nación de naciones». Mariano Rajoy rechazó con rotundidad cualquier reforma de la Constitución que desvirtúe la unidad de España y de alas a las pretensiones de los partidos nacionalistas. El presidente del Partido Popular, que rindió ayer homenaje en Irún (Guipúzcoa) a sus compañeros de partido asesinados por ETA, reprochó a los socialistas haberse convertido en «españoles vergonzantes» para conservar el respaldo de sus socios. Por tercer año consecutivo los populares vascos recordaron en la localidad fronteriza, con una ofrenda floral frente al monolito-monumento erigido en su memoria, a los 17 miembros de Alianza Popular, UCD y PP del País Vasco asesinados por el terrorismo etarra. Acompañado por el secretario general del partido, Ángel Acebes, y la presidenta del PP vasco, María San Gil, Rajoy advirtió al Gobierno de que no podrá contar con el PP para reformas de la Carta Magna o del Estatuto de Gernika que alteren el modelo de Estado acordado al comienzo de la transición. «Que nadie espere que abandonemos nuestras convicciones. Nosotros no vamos a escribir otro Estatuto para dar gusto a los nacionalistas. No vamos a convertirnos en nacionalistas templados ni en españoles vergonzantes. Eso se lo dejamos a otros que renuncian a sus ideas porque sueñan en compartir el poder», afirmó el líder de la oposición durante un discurso cargado de un altísimo contenido emocional, que fue seguido por numerosos dirigentes del PP del País Vasco y por la ex comisaria europea Loyola de Palacio, entre otros. Dos meses después de clausurar en San Sebastián el Congreso del PP vasco que traspasó la presidencia de la formación de Carlos Iturgaiz a María San Gil, Mariano Rajoy volvió a Guipúzcoa para defender con énfasis la unidad de España. «Idea de España» A tres días de que se vote en el Parlamento Vasco el Plan Ibarretxe -que Rajoy calificó como «obstáculo para la paz»-, Rajoy resaltó que «el único futuro viable se llama España, el único consenso en el que cabemos todos se llama España, y el único marco para nuestra convivencia se llama España». El líder de la oposición arremetió contra el PSE y su proyecto de reforma del estatuto de autonomía y acusó a los socialistas de renunciar a la idea de la unidad de España. «Cuando en Euskadi algunos apagan la luz de sus propias convicciones y renuncian a defender la idea de España, ya no queda más que un partido que defienda la verdad de que los vascos son españoles y el derecho de los españoles a contar con el País Vasco», explicó.