Alrededor de 3.000 vehículos quedaron atrapados en las carreteras
Alrededor de 3.000 vehículos sufrieron las consecuencias del temporal de frío y nieve que asoló diferentes puntos de la península, destacando las carreteras de León, Asturias y las autopistas A-1 y AP-1 entre Briviesca y Burgos como las más afectadas. Unidades del ejército se desplazaron hasta estas localidades para evacuar a las personas que estaban atrapadas. Alrededor de 500 personas quedaron alojadas en los polideportivos de Burgos, donde pasaron una noche hasta que se retomó la circulación en las carreteras burgalesas. Los más de 900 vehículos que estuvieron parados la noche del domingo 25 en la carretera N-622 en Lerma, dirección a Burgos, pudieron emprender viaje después de que máquinas quitanieves dejaran expedita esa ruta donde las nevadas llegaron a cubrir las carreteras con 20 centímetros de espesor, lo que impedia la circulación.