El reparto de fondos procedentes de Europa se reducirá entre un 15% y un 35% respecto a las campañas anteriores
La Junta amenaza la reconversión del viñedo en León con recortes en las ayudas
La Dirección General de Producción Agropecuaria ha lanzado una propuesta basada en la reducción de los porcentajes de ayuda que reciben los viticultores para modernizar y reconvertir los viñedos, una drástica medida que amenaza directamente los intereses de un centenar de productores leoneses que esta campaña recibirán un millón de euros para modernizar 219 hectareas de viñas. La Consejería de Agricultura pretende rebajar entre un 15% y un 35%, dependiendo de las labores realizadas, las subvenciones financiadas con fondos europeos, que en campañas anteriores llegaban hasta el 75% del total de la ayuda solicitada. La falta de presupuesto, denunciada fervientemente por los sindicatos agrarios, ya ha limitado otras líneas de ayudas agroambientales y la Junta se ha visto obligada a denegar una parte importante de las solicitudes, circunstancia que las opas temen que se traslade al sector vitivinícola. Priorizar a los jóvenes La reacción de los sindicatos no se ha hecho esperar. Asaja exige al consejero José Valín que cumpla con la normativa y dé prioridad en el reparto de las ayudas a los planes de reestructuración y reconversión de viñedo presentados por jóvenes y agricultores y a título principal, en lugar de aplicar un recorte lineal de la subvención a todas las solicitudes, sin tener en cuenta su procedencia. Un error para el sector La organización agraria considera que sería un error penalizar por igual a todos los colectivos que han presentado planes de viñedo para conseguir ajustar el limitado presupuesto -8,1 millones de euros, en lugar de los 15,3 que serían necesarios- a las solicitudes. Según expuso el director general de producción Agropecuaria, Baudilio Fernández Mardomingo, la idea de la Junta es aplicar un recorte en la ayuda a todos los planes presentados, fórmula por la que se dejarían de percibir hasta 3.000 euros por hectárea. Esta medida no parece estar legalmente justificada, puesto que en la misma orden de ayudas a los planes de reestructuración y reconversión del viñedo (79/2004 de 15 abril, en su artículo 12.II.3) se indica que los agricultores a título principal deben de tener prioridad. Igualmente, la normativa emitida por el Ministerio de Agricultura recalca que «las comunidades autónomas establecerán prioridades potenciando especialmente a los jóvenes agricultores y a los ATP». Así no se fija población Asaja subraya su oposición, sin ambigüedades, a la determinación de la consejería de modificar en este caso un criterio de prioridad sensato y lógico, puesto que obedece al objetivo de promover el sector y favorecer la fijación de población en el medio rural. «No se puede pasar por alto este cambio de criterio y aceptar que tanto los ATP como los jóvenes agricultores y el resto de colectivos solicitantes de estas ayudas, sean penalizados de la misma e indiscriminada manera», denuncia. Coag también ha rechazado «con toda dureza» las pretensiones de la Consejería de Agricultura, a las que considera «inaceptables», al tiempo que reclama «un mayor esfuerzo presupuestario» a fin de mantener los niveles de ayuda en los de años anteriores. «Así se evitarían agravios comparativos entre unos viticultores y otros», indicaron fuentes del sindicato en Valladolid.