Alonso asegura que había motivos para detener a los militantes del PP

Ni el Ministerio del Interior ni ninguna persona de la estructura política del ministerio dirigió consigna u orden alguna sobre la actuación policial y ni mucho menos dio la de detener a nadie». José Antonio Alonso fue tajante e insistente ayer en el Congreso, hasta el punto de que negó en una decena de ocasiones que desde el Gobierno se dieran instrucciones para arrestar a Toñi de la Cruz y a Isidoro Barrios, los dos militantes del PP que aparecen en las fotografías del intento de agresión a Bono en la manifestación de las víctimas del terrorismo. Alonso defendió en todo momento que la policía actuó «de oficio» en la investigación de los altercados de la marcha, «sin ningún tipo de interferencias» y de manera «absolutamente profesional». Negó asimismo que la policía actuara con «exceso de celo» por el interés que se tomó a la hora de tratar de identificar a los alborotadores, y aseguró que las fuerzas de Seguridad llegaron a la conclusión de que existían «motivos racionales y suficientes» que llevaron a concluir que De La Cruz y Barrios participaron en «una actividad delictiva».