Sólo una cuarta parte de las pruebas del asesinato de Sheila han sido analizadas

El asesinato de la joven Sheila Barrero Fernández en Villablino, hace hoy un año y 14 días, no es un caso cerrado, si bien la investigación no ha dado ni un solo resultado hasta el momento. Según ha podido saber este periódico, de las más de cien pruebas que se retomaron en su momento en el lugar del crimen sólo han sido remitidas al juez menos de 30. De ellas, ni una sola ha sido cotejada. El resto de los vestigios enviados a Madrid y estudiados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ni siquiera han sido investigados hasta el momento, aunque fuentes consultadas creen que este proceso se terminará en los próximos dos meses. Entre este denso y profuso material se encuentran restos orgánicos encontrados en el interior del vehículo donde apareció el cadáver de la joven y también en el entorno del vehículo. El sumario de este caso ya está compuesto por miles de folios -el titular del juzgado de instrucción de Cangas de Narcea tiene en sus manos seis tomos-, en los que se incluyen alrededor de 700 entrevistas realizadas a lo largo de este tiempo en alguna de las cuatro líneas de investigación que se mantienen abiertas en torno a este crimen. Concluyente para la causa La familia de la joven apunta que, en estos momentos, se están practicando pruebas testificales en torno a las declaraciones que en su día fueron tomadas por la policía judicial de la Guardia Civil. Los resultados de esta investigación, unidos a los que se obtengan del análisis de las pruebas remitidas a la UCO, pueden ser determinantes para esclarecer la causa. Hasta ahora sólo se ha imputado a B.V., de 19 años de edad y vecino de Villager de Laciana, que fue puesto en libertad por falta de pruebas concluyentes que le relacionaran con el asesinato. No obstante, el joven continúa presentándose los días 1 y 15 de cada mes ante el juez instructor como medida preventiva. La familia ha solicitado infructuosamente, al menos hasta la fecha, una prueba de ADN de este joven. La defensa sostiene que someterlo a este examen supondría un trato agresivo e innecesario para su cliente. El pasado sábado, familiares de Sheila mantuvieron su último encuentro con la Guardia Civil de Villablino, del que no extrajeron conclusión alguna.