Gerry Adams cree que existe «una oportunidad única» para atajar el conflicto vasco
El presidente de la formación nacionalista irlandesa Sinn Fein sostuvo que ahora se presenta «una oportunidad única» para resolver el conflicto en el País Vasco y terminar con el terrorismo de ETA. Gerry Adams confió en que «los esfuerzos» por parte de «partidos políticos españoles y del País Vasco» para normalizar la situación política en Euskadi lleguen a buen puerto y desemboquen en un proceso de paz. Si alguien buscó intenciones ocultas en la presencia de Adams en España con los rumores sobre eventuales contactos del Gobiernoy de mediadores del Ejecutivo de Vitoria con miembros de Batasuna y de ETA, el propio líder del Sinn Fein se encargó desmentirlo. «El objetivo de mi visita -dijo- es vender libros», en alusión al volumen Memorias políticas que presentó este miércoles en la capital. Adams, no obstante, se permitió hacer una serie de reflexiones sobre la situación en el País Vasco y las posibilidades de la apertura de un proceso de pacificación. «Ojalá que fructifiquen los esfuerzos para la paz», deseó. El líder nacionalista irlandés dijo estar informado de «las iniciativas» planteadas para «poner en pie un proceso de paz», datos que espera ampliar en las reuniones que mantendrá con Ibarretxe y Otegi, así como con Carod-Rovira. No sin diálogo El presidente del Sinn Fein declaró que, si es requerido, estará «encantado» de «ayudar» para la apertura de negociaciones entre todas las partes, pero precisó que no ha hablado con nadie. Sugirió que el sacerdote Alec Reid, quien ya ejerció un relevante papel en el proceso de paz irlandés, puede ser un mediador e «intervenir». Adams sostuvo que entre las situaciones de Irlanda y el País Vasco «no se pueden establecer paralelismos», si bien consideró que «los principios generales» para la resolución de conflictos son aplicables. Entre estas normas básicas, citó «el diálogo, estar dispuesto a escuchar, y llegar a acuerdos y compromisos». Subrayó que el diálogo es la herramienta básica porque con él «los problemas se resuelven» y está demostrado que «aniquilarlos», en alusión a las vías represivas, no es la solución. «No hay avance en la solución de los conflictos -insistió- sin diálogo».