La AVT pide el cese de Peces-Barba y le acusa de «injurias y calumnias»
La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) anunció ayer que rompe sus relaciones con el Alto Comisionado cuya tarea es apoyarlas, Gregorio Peces-Barba. Sólo han transcurrido dos meses y medio desde que José Luis Rodríguez Zapatero anunciara a bombo y platillo la creación de esta nueva figura, con la que pretende reforzar la atención a quienes han pade-cido atentados y a sus familias. Fue el mismo día en que Pilar Manjón compareció ante la comisión de investigación del 11-M y criticó muy duramente a los políticos. La AVT decidió tomar esta decisión después de que el presidente del Gobierno rechazara su petición de destituir a Peces-Barba. En el curso de una reunión celebrada en el palacio de la Moncloa durante más de una hora, Zapatero comunicó a la junta directiva de esta organización que mantiene toda su confianza en el rector de la Universidad Carlos III, que seguirá al frente del Alto Comisionado. Conversación La asociación pidió al jefe del Ejecutivo la dimisión de Peces-Barba por las «injurias y calumnias» que, en su opinión, ha vertido contra este colectivo. En concreto, la asociación se queja de que negara una conversación con la AVT en la que planteó la posibilidad de abrir un foro de debate sobre una futura amnistía a presos de ETA sin delitos de sangre. «Un señor que miente, no puede representar a un colectivo tan digno», afirmó Francisco José Alcaraz, presidente de la AVT. También le echa en cara su ausencia de la manifestación de apoyo a las víctimas que tuvo lugar en Madrid el 22 de enero. «No es un intermediario apropiado ni correcto», afirmó Alcaraz, quien subrayó que el representante gubernamental «no goza de la confianza de las víctimas». Asimismo, dijo que había recibido cientos de quejas de sus asociados, reclamando la marcha de Peces-Barba, a quien reprochan que «tenga tanta comprensión con todo el entorno etarra». De ahora en adelante, la AVT planteará sus reinvindicaciones al Gobierno a través del Ministerio del Interior y su Oficina de Atención a las Víctimas del Terrorismo, como hacía antes. Pero no asistirá a la reuniones que convoque el comisionado, incluido un congreso de colectivos de víctimas que presidirá el Rey en junio. Cuando se creó la nueva institución, la AVT coincidió con el PP en criticar que el Gobierno no hubiera consensuado su nombramiento, aunque decidió darle un margen.