Zapatero proclama su fe en Europa como la gran esperanza para la paz

José Luis Rodríguez Zapatero defendió ayer ante la Asamblea Nacional Francesa el modelo territorial de nuestro país porque «la España del castellano es grande, pero lo es más sumada a la España del catalán, el gallego y el euskera». El presidente del Gobierno se presentó ante los parlamentarios galos con los deberes hechos, tras el amplio respaldo obtenido por la Constitución Europea en el referéndum de la pasada semana, una asignatura que no será tan fácil de aprobar para el primer ministro Jean-Pierre Raffarin. «La divisa de la Unión Europea unida en la diversidad adquiere pleno sentido para los españoles», porque « la España democrática es inseparable del valor de la diversidad y del respeto a su ejercicio cotidiano por todos», enfatizó el presidente. Zapatero proclamó su fe en Europa como «la gran esperanza para la paz» y contra «las injusticias en el mundo», partiendo de la base de que el español «es un pueblo contrario a la guerra». Inevitablemente evocó la masacre del 11-M, para agradecer la solidaridad del pueblo francés y su «eficaz cooperación» en la lucha contra el terrorismo. Con Machado A los parlamentarios franceses les ofreció «un compromiso de fraternidad» tras recordar que fue tierra de esperanza para los emigrantes españoles y para todos aquellos «que encontraron en Francia una patria de refugio frente al fascismo». El poeta Antonio Machado mereció aquí una mención especial. El retrato que hizo de nuestro país ante los diputados galos fue el de «una sociedad abierta a la cultura, a la innovación, a la cooperación internacional; una sociedad que se siente solidaria con el destino del mundo». Daba así la razón al primer ministro Jean-Pierre Raffarin, que en sus palabras de bienvenida definió la España de hoy como «uno de los países más dinámicos de Europa, ha recuperado su retraso». Y Raffarin aseguró que recor-daba «los debates provocados en Francia por la adhesión española» hace 20 años, para llegar a la conclusión que la evolución de España «es la mejor prueba de la fuerza de Europa». El gobierno francés dará a conocer esta semana la fecha de su referéndum sobre la constitución europea. Aunque los sondeos predicen un respaldo del 63% de la población, Raffarin teme que el descontento social y el aumento del desempleo lleven a los ciudadanos a pronunciarse por un voto de castigo a su política interna. El escándalo de su ex ministro de Finanzas tampoco ayuda.