Los alumnos pasarán dos evaluaciones no computables a los 10 y a los 14 años

Los estudiantes tendrán que afrontar dos evaluaciones generales de diagnóstico durante su etapa en la educación obligatoria, una en cuarto de Primaria (10 años) y otra en segundo de la ESO (14 años). Estas pruebas no serán computables ni determinarán si se supera el curso. Su objetivo es evaluar el nivel educativo del estudiante y reforzar las áreas donde se determine la existencia de problemas. Ésta es una de las principales novedades del anteproyecto de Ley Orgánica de Educación (LOE) presentado ayer por la ministra María Jesús San Segundo a las comunidades autónomas. La normativa, que sustituirá a la Loce del PP, entrará en vigor en el curso 2006/2007. Esta ley de educación, que será la sexta de la Democracia cuando se apruebe, recoge las normas básicas, por lo que los aspectos puntuales como el desarrollo curricular o la existencia de asignatura alternativa a la Religión se regularán en desarrollos posteriores. Según la ministra, su objetivo es dar más importancia a la lectura, escritura y matemáticas, así como la corresponsabilidad en la escolarización y la atención a la diversidad del alumnado. Repetición de curso Los estudiantes sólo podrán repetir curso una vez en Primaria y dos en Secundaria. Con dos asignaturas o menos suspendidas se podrá promocionar. Con tres se abre la posibilidad, que determinarán los profesores, de que el alumno pase con un plan de apoyo o refuerzo. Y con cuatro o más, la repetición es obligatoria. Aunque, según señaló San Segundo, no para hacer lo mismo, sino con un plan de trabajo específico. Nuevas asignaturas Para potenciar la educación en valores de igualdad, democracia y ciudadanía los alumnos cursarán en Primaria, en dos cursos de Secundaria y en uno de Bachillerato la asignatura de Educación para la Ciudadanía. Además, para que tengan una cultura científica básica, se crea en el bachillerato la materia de Ciencias para el mundo contemporáneo. Infantil y primaria Será gratuita a partir de los tres años. Se implanta desde los cinco años la enseñanza de un idioma extranjero, así como formación en las nuevas tecnologías de la información y la comunicación. En Primaria comenzarán los planes de refuerzo y apoyo. Secundaria y bachillerato Para facilitar la transición de Primaria a Secundaria, en los dos primeros cursos de la segunda etapa (de 12 a 14 años) sólo habrá dos asignaturas más. El último curso de la ESO tendrá carácter orientador con diferentes optativas. Habrá tres modalidades de Bachillerato: Artes, Ciencias y Tecnología, y Humanidades y Ciencias Sociales. Las pruebas extraordinarias de recuperación (junio o septiembre) se realizarán a partir de cuarto de la ESO. Se elimina la Reválida del Bachillerato, aunque para entrar en la Universidad habrá una prueba de acceso. Sin precisar María Jesús San Segundo no precisó si la Religión se impartirá en horario lectivo ni si el Gobierno consultará al Consejo de Estado sobre la obligatoriedad de dar una alternativa, como se había planteado inicialmente. La ministra hizo todo lo posible por evitar polémicas.