El grupo terrorista ETA está pasando «por una difícil situación» y tiene problemas para reorganizar sus redes, pero está reclutando a «un amplio número de jóvenes», lo que le proporciona «un importante potencial humano», según un informe elaborado por Europol, al que ha tenido acceso Efe. Además de esos jóvenes, ETA cuenta con «militantes veteranos recuperados de Latinoamérica», afirma el documento, elaborado con la información proporcionada por los Estados miembros de la UE, que cubre el periodo octubre 2003-octubre 2004, y que ya ha recibido el visto bueno de los Veinticinco a nivel de embajadores. En el mencionado periodo, el aparato militar de ETA «ha sido fuertemente debilitado», así como su red logística y sus unidades de información y suministro, debido a la sucesiva disolución de unidades dirigentes y a la detención de activistas, que impidieron la comisión de «muchos ataques planeados por la organización», agrega el informe. De ahí, que apunte, como elección estratégica, a la posibilidad de «proyectar la lucha armada de la organización hacia Francia». «Aunque no está previsto que ocurra a corto plazo, a causa de las consecuencias negativas que tendría para el liderazgo de la organización en Francia, es algo que debe ser considerado», afirma el texto. También destaca que «la organización está mostrando tendencias de expansión hacia otros países europeos, como Alemania, Italia, Portugal, Holanda y Bélgica, mediante el envío de militantes que establecerían una infraestructura encubierta bajo actividades legales». Nuevas estructuras ETA está igualmente «creando nuevas estructuras en América Central», señala el documento de Europol, la oficina europea de policía. La expulsión de 20 militantes de ETA desde México en los últimos seis años ha provocado movimiento hacia otros países latinoamericanos, como Venezuela, Nicaragua, República Dominicana o Belice. El informe señala como razón principal de la debilidad de ETA la «muy estrecha cooperación entre España y Francia», que ha provocado «un notable descenso en el número de ataques cometidos por la organización en España, con las cifras más bajas desde 1973». Además sostiene que el impacto de las detenciones, en octubre en Francia, de algunos de los líderes de ETA y diversas incautaciones de material aún deben ser evaluadas. Para responder a sus problemas e intentar garantizar la continuación de sus estructuras orgánicas y su capacidad operativa,
. El informe resalta que «el movimiento separatista vasco ETA considera aún el territorio francés como una base frecuentemente usada por sus líderes para sus actividades criminales». Aunque a corto plazo «no parece que ETA quiera modificar su estrategia de un frente único con la mayor parte de su actividad terrorista concentrada en la parte española de Euskal Herria», tampoco puede descartarse esa posibilidad. La presencia de tropas españolas en Afganistán sigue situando a España bajo la amenaza del extremismo islámico, que puede atacar «en cualquier momento», según un informe elaborado por Europol. También la Unión Europea sigue siendo un «objetivo potencial, un terreno de reclutamiento y una base logística» para el terrorismo islámico inspirado por Al-Qaida, según el documento. El informe indica textualmente que «la presencia de tropas españolas en Afganistán continúa atrayendo amenazas de elementos extremistas islámicos: tales amenazas podrían materializarse en cualquier momento». La breve parte del informe dedicada a España señala que las investigaciones de la Policía relacionadas con los atentados del 11 de marzo de 2004 «han mostrado que el núcleo central de las células islamistas relacionadas con los ataques fue probablemente neutralizado tras el suicidio de Leganés». Sin embargo, «existe la posibilidad de que algunos miembros de esa célula puedan estar aún en situación de realizar otros ataques violentos». Asimismo, afirma que en el caso de España, cuando se evalúan las posibles amenazas planteadas por el terrorismo islámico, se debe tener en cuenta las informaciones proporcionadas por presuntos terroristas. Los acontecimientos de Madrid «demostraron la capacidad de un grupo inspirado en Al Qaida de preparar y cometer un ataque sin avisar contra un objetivo civil en Europa». Por ello, en el conjunto de los 25, Europol considera que la amenaza procedente de «Al Qaida y sus afiliados y seguidores» aparece como «la principal preocupación para la seguridad de la Unión Europea», a pesar de que el abanico de terrorismo internacional que podría impactar en la UE «es muy amplio». Sin embargo, debido a los atentados terroristas en Madrid y al amplio número de células islámicas desmanteladas en Europea -»algunas de las cuales estaban activamente preparando ataques»-, la principal amenaza del terrorismo internacional procede de grupos islámicos relacionados con Al Qaida. Esa amenaza varía sin embargo dependiendo de los Estados miembros, con algunos que consideran que no están bajo la amenaza directa pero que saben que podrían sufrir ataques contra objetivos extranjeros en su territorio, sobre intereses judíos o estadounidenses. El informe también resalta que el «terrorismo anti-occidental inspirado en Al Qaida» se ha extendido ahora a Irak, «incluso aunque algunos grupos que luchan contra las fuerzas de coalición parece que no tienen motivaciones religiosas». Por países, también la amenaza terrorista internacional sobre Francia está relacionada con la esfera de influencia e ideología de Al Qaida y, aunque la apariencia es que se trata de un país menos expuesto, el informe recuerda que intereses galos han sufrido once ataques, directa o indirectamente.