Diario de León

El PCTV niega que sus interventores tuvieran relación con Batasuna

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europa press | san sebastián

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El Partido Comunista de las Tierras Vascas asegura que las informaciones sobre sus interventores y su relación con Batasuna son actitudes «fascistas». La cabeza de lista de este partido por Vizcaya, Maite Aranburu, aseguró que estos apoderados eran del partido comunista abertzale y no de la formación ilegalizada. El portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, advirtió al Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido, que «no se puede acabar con la izquierda abertzale», aunque investigue «lo que quiera». Aranburu explicó que los interventores eran «del PCTV, ni de Batasuna, ni de EH», aunque ya se sabe que muchos de ellos eran concejales y cargos públicos de la formación ilegalizada. Según explicó, fue posible nombrar interventores en la mayoría de las mesas, algo de lo que se jactó Batasuna en su informe sobre estas elecciones autonómicas, «gracias a la marea de solidaridad» que se desató a su favor, según dijo, en el País Vasco. Comportamientos fascistas La dirigente comunista abertzale respondió así a la investigación sobre los interventores del Fiscal General, exigiendo además al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que «acabe con estos comportamientos fascistas». «Ya es hora de envainar esa espada de Damocles que ha colocado sobre nuestras cabezas», le pidió. «Basta ya», añadió, porque el PCTV es un partido legal que está soportando «presiones fascistas intolerables» y se mostró convencida de que «las 150.000 personas que eligieron la papeleta del PCTV el pasado 17 de abril exigieron un nuevo escenario de paz y democracia». Esta investigación de la Fiscalía, dijo Aranburu, es «un último ataque» que enmarcó en «el conjunto de agresiones antidemocráticas que estamos padeciendo en las últimas semanas». Y aunque la frase anterior la pronunció en primera persona, citó lo que «pasó con los 27.000 firmantes a favor de Aukera Guztiak», plataforma a la que se impidió participar en las elecciones por su vinculación a Batasuna, y «el reconocido espionaje diario durante la campaña a las personas de la candidatura» de los comunistas abertzales.

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