Todos los partidos excepto el PCTV condenan los atentados
Instituciones, organizaciones empresariales y partidos democráticos, a excepción del Partido Comunista de las Tierras Vascas, condenaron los atentados perpetrados por ETA contra cuatro empresas guipuzcoanas. El Gobierno vasco señaló que quienes han colocado los explosivos y han ordenado los atentados «han puesto en riesgo la viabilidad y existencia» de empresas que «aportan progreso y ofertan empleos» a las personas que «desean vivir en paz». El Ejecutivo autónomo denunció que la banda «prefiere vivir permanentemente en el pasado y no renunciar a la violencia, el chantaje y la amenaza», y lamentó que con estos atentados se ha podido transmitir «un mensaje de miedo y temor» que puede hacer «más factible su proyecto de amenaza y chantaje a la sociedad». La patronal vasca Confebask lamentó que los atentados vengan a «ensombrecer las esperanzas que vienen depositando el conjunto de los ciudadanos vascos en el fin de la violencia». La patronal guipuzcoana Adegui, por su parte, preguntó a ETA si estos atentados representan su «anhelo de paz» y si «dañar» instalaciones, «poner en peligro» puestos de trabajo y «amenazar y chantajear» al empresariado es la «aportación» que ETA hace a la «actual coyuntura de este país». Para Adegui, los atentados demuestran que ETA «desprecia el clamor de paz y bienestar» de los vascos. El PNV también condenó los ataques. El presidente de este partido en Guipúzcoa, Joseba Egibar, apuntó que «cuando se reivindican a los cuatro vientos todos los derechos para todas las personas en toda Euskal Herria es evidente que con estas acciones y atentados se vulneran derechos y quienes se sitúan en esas coordenadas vulneradoras de derechos tienen que respetar lo que este pueblo ha decidido, que es el respeto de los derechos humanos de todas las personas». La secretaria general de la dirección del PNV, Josune Ariztondo, sostuvo que «es inútil que ETA se muestre de acuerdo con el espíritu de Anoeta en sus escritos, es inútil que se empeñe en decir que defiende los derechos de Euskal Herria, de la ciudadanía, si con sus actos desprecia lo que esta ciudadanía le exige: que callen las amenazas, la extorsión, el chantaje, las armas y que ETA desaparezca». El socio en el Gobierno vasco, Eusko Alkartasuna, acusó además a la banda terrorista de «hacer más difícil el avance de la soberanía y el autogobierno», sobre todo cuando vivimos «un momento histórico» ya que «cuando lo que se necesita es un clima de respeto, de distensión, estos actos no son más que un obstáculo». El socio menor en el Ejecutivo vasco, Ezker Batua, calificó de «ataque contra las ilusiones y el deseo de paz de la sociedad vasca» lo ocurrido esta madrugada. Ezker Batua lamentó además que este tipo de acciones «dificulten de forma extraordinaria» el diálogo para la paz, a punto de ponerse en marcha.